Vuelta al cole presencial en Sevilla en plena sexta ola y con la vacunación incompleta

Sin embargo, tras la reunión de la pasada semana del Consejo Interterritorial del Gobierno con las comunidades, en Sevilla, como en el resto de Andalucía y España, se despejaron las dudas y se descartó la vuelta al sistema virtual. Se decidió que el retorno será totalmente presencial basándose en el argumento de que los centros escolares son espacios seguros. Eso supone que, por el momento, no hay intención de volver a las clases virtuales. Además, la Comisión de Salud Pública, dependiente del Ministerio, aprobó el pasado viernes que solo se recomendará poner una clase en cuarentena cuando se detecten cinco casos o más de infección activa o afectación del 20% o más de los alumnos del grupo en un periodo igual o inferior a siete días.

La formación ‘online’ con clases semipresenciales sólo se adoptará para las zonas que estén en los niveles 3 y 4 de alerta para los estudiantes a partir de 3º de ESO . Es decir, que los alumnos de colegios e institutos de Sevilla se libran de las clases virtuales mientras no empeoren los datos sanitarios.

Pero ¿en qué situación se encuentran las aulas sevillanas para afrontar la reapertura? En la provincia el trimestre acabó con cifras positivas. Según la Delegación de Educación, el 98% de las aulas no resultó afectada por el Covid y sólo un 1,4% sí lo fue. En cuanto al número de aulas, hubo 266 que tuvieron que ser cerradas en algún momento durante los tres primeros meses de curso y cuatro colegios completos, un 0,2% del total. Son datos que desde Educación consideran positivos y que, además, suponen que en Sevilla la situación es algo mejor que la del resto de Andalucía, si se tiene en cuenta que el porcentaje de aulas afectadas es inferior al de la media de la comunidad.

La vuelta a las aulas llega con la campaña de vacunación entre los escolares más pequeños recién iniciada y con un porcentaje de vacunación que aún no llega al 35% entre los menores de doce años. De hecho, los últimos datos revelan que, pese al avance de la campaña de vacunación a los menores de doce años y que ya se está incluyendo a los pequeños de seis y siete años en Sevilla, el número de inmunizados de cinco a once años era de algo más de 59.000 niños, según el último dato del pasado sábado.

En cuanto a los maestros la inmunización con la tercera dosis ha llegado ya a algo más del 50% del profesorado, según insistió la pasada semana el propio consejero de Salud, Jesús Aguirre. Además desde la Junta se insiste en recordar la poca virulencia de la cepa Ómicron en los estudiantes de colegios y universidades como argumento para la apuesta por la presencialidad.

Lo que sí se mantiene son los protocolos sanitarios de los tres primeros meses del curso. Se seguirán con los grupos de convivencia escolar, que la Junta considera clave para la limitación del número de contactos y para facilitar la información relevante en caso de sospecha o confirmación de un positivo, o las entradas y salidas escalonadas con las que se pretenden evitar aglomeraciones en las puertas de los centros.

A este respecto, la Asociación Andaluza de Directores y Directores de los centros públicos de Educación Infantil, Primaria, Educación Especial, Educación Permanente y Residencias Escolares (Asadipre) apoya el sistema presencial asegurando que cerrar los centros podría ocasionar un problema, tanto para los padres que no pueden dejar a sus hijos con otros familiares como para los alumnos.

En cualquier caso, esta asociación pide mejorar las condiciones en los centros educativos invirtiendo en medidores de aire que informen de la calidad del mismo, así como en filtros HEPA que la mejoren. Y también que se acelere la vacunación del alumnado de cinco a once años y se intensifique la vacunación a los docentes con la tercera dosis.

Los sindicatos, por su lado, aprovechan para pedir mejoras. Desde la Federación de Enseñanza de la Unión Sindical Obrera de Andalucía se insiste la reducción de la ratio y que se instalen purificadores de aire. Entre otras medidas, también solicitan test de antígenos de forma generalizada, tanto al alumnado como al profesorado y personal de administración y servicios, y que se ventilen correctamente las aulas y se instalen purificadores de aire. Y, sobre la posibilidad de que los mayores tuvieran que volver a la modalidad virtual, es algo que tampoco gusta a los padres después de que el pasado curso hubiera muchas quejas de los de Bachillerato que argumentaban que con sólo la mitad de clases no se podía dar todo el temario.

Seguramente por eso Fampa Nueva Escuela ha cuestionado esta opción asegurando que se trata de una «improvisación» y acusando a la Junta de Andalucía de poner la responsabilidad y seguridad de los centros sobre los hombros de la comunidad educativa y las familias. Y a todo ello se sumala posibilidad de que haya numerosos docentes de baja por Covid y la incertidumbre sobre su sustitución.