Vuelta al cole con los maestros ya vacunados y los escolares a punto

Será un curso en el que, aunque se mantienen los protocolos prácticamente idénticos a los del año pasado, no se parte en la misma situación que en septiembre pasado. La principal diferencia es que el tercer curso de la era Covid (la pandemia afectó al curso 2019/2020 y al 2021/2021) empieza con un alto porcentaje de inmunización. De hecho, el profesorado que se incorporará a las aulas está vacunado y entre el alumnado el porcentaje de escolares que lo están va aumentando día a día.

En la ESO, donde la mayoría de los estudiantes tienen más de 12 años , hay ya más de un 78 por ciento de vacunados . Y la previsión es que se vaya aumentando y que la inmunización comience a llegar a los menores de 12 años. Es decir que los escolares de los colegios sean vacunados ya que los de los institutos ya han comenzado. La Junta de Andalucía ya ha anunciado que se vacunará en los colegios en una campaña que se prevé que comience el próximo mes de octubre.

Por eso, aunque los protocolos seguirán siendo estrictos y las mascarillas y las distancias de seguridad se mantendrán dentro y fuera de las aulas, el punto de partida es mucho más positivo que el que había hace un año cuando ni siquiera había vacuna. Yla esperanza es que el curso que ahora empieza sea el de la vuelta paulatina a la normalidad.

En esa línea se pronuncia la delegada de Educación en Sevilla, María José Eslava, que recalca que aunque resulta «imposible» que sea un curso cien por cien normal porque la situación sanitaria aún no lo permite, será «más normalizado» que el pasado cuando , al inicio de la etapa escolar, hubo hasta manifestaciones en contra de que los niños volvieran a las aulas.

Sin embargo, después de que la incidencia fuera menor en colegios e institutos y que se llegar al mes de junio con más del 94 por ciento de los centros libres de Covid, se ha optado por repetir un modelo que resultó exitoso. Por eso, con algunas excepciones, las mascarillas, los grupos burbuja y el resto de protocolos sanitarios se mantendrán hasta nuevo aviso, igual que los enlaces Covid.

La principal diferencia con respecto al curso pasado (además de la reducción de la distancia de 1,5 a 1,2) es que la presencialidad será total. Se ha descartado el modelo que adoptaron muchos institutos el pasado curso y por el que a partir de 3º de ESO y en Bachillerato había turnos para ir a clase. «Es muy importante_dice la delegada de Educación_ ya que sólo se pasará al sistema de semipresencialidad si se llega a los niveles 3 y 4 de alerta sanitaria». Un modelo que, según dice, también se ha aprendido pese a que los centro no estaban preparados para ese resto digital. Aún así, desde Educación se recuerda que están «más puestos» en ese tema ya que se ha invertido en formación del profesorado.

En cualquier caso la delegada espera que al poco de iniciar el curso se empiece a vacunar a los más pequeños tal y como ha anunciado la Consejería de Salud. Aunque aún está por perfilar el plan en las comisiones creadas entre las c onsejerías de Salud y Educación, la idea es que los pequeños sean vacunados a partir de octubre en los propios centros escolares. Se hará así para evitar sacarlos de su entorno educativo y también para facilitar la conciliación de las familias ya que no es lo mismo que tegan que llevar a los niños al centro de vacunación que los sanitarios vayan al colegio y les den las cartillas, como se hacía hace algunos años con las vacunaciones infantiles.

Desde los colegios también hay algunas críticas antes de que comience el nuevo año académico, pero la mayoría de profesores y directores de centros cree que será el curso en el que se avance en el camino hacia la normalidad. Así lo manifiesta Jorge Delgado, presidente de asociación de directores de centros de Andalucía, Asadipre, que espera que el próximo sea un curso mejor que el anterior aunque se mantengan los protocolos sanitarios prácticamente idénticos a los del pasado curso. «El año pasado nos incorporamos sin vacuna y este año los profesores estamos vacunados», admite Jorge Delgado, que lo considera algo importante aunque no todos los niños estén inmunizados.

Sin embargo Delgado advierte que el hecho de que la distancia de seguridad se reduzca de 1,5 a 1,2 metros también provocará un aumento de la ratio, una de las batallas por las que algunos centros y familias llevan tiempo luchando. «Habrá más alumnos en las clases», advierte.

Además tambíen avisa de que este curso llegarán menos profesores de refuerzo. «Lo maquillen como lo maquillen, hay menos maestros», advierte el representante de los directores de centros, que también recuerda que el au mento de profesores hizo que los resultados académicos mejoraran el curso pasado con respecto a los anteriores. En cualquier caso, Delgado apunta a una reducción de en torno al 30 por ciento de los refuerzos pese a que aún no están las cifras definitivas de cuál será el número exacto ni los criterios en los que se basarán para asignarlos. Pese a las críticas, prefiere ser positivo y apuesta porque sea el curso de la «transición hacia la normalidad». Ytambién recuerda que los resultados académicos han mejorado gracias a los profesores de apoyo.

En esa vuelta a la normalidad paulatina que se espera para este año también entra la recuperación de las actividades extraescolares que volverán en la mayoría de los centros educativos después de un curso en que muchos colegios no las ofrecieron porque muchas familias no se atrevían a apuntar a sus hijos a más actividades después de las clases obligatorias. De momento, según confirman desde los centros, hay más interés por estas a la par que están aumentando las peticiones para los servicios de comedor y aula matinal.

Uno de los centros que prevé volver a realizar más actividades es el colegio José María del Campo enTriana. Su directora, Sonsoles Salazar, afirma que si todo va bien volverán a hacer excursiones fuera del centro, sobre todo al aire libre. Salazar, que también se muestra crítica con la reducción de los refuerzos que esperan, confía en que se siga avanzando en la mejoría y que la normalidad pueda llegar en torno a la primavera.

En cualquier caso, a la espera de que se avance en la vacunación, Educación insiste en la tranqulidad. «Nuestros centros son sitios seguros para el alumnado y los docentes», recalca la delegada de Educación. Sobre el debate de la bajada de la ratio tambíen es clara: En Sevilla la ratio de los centros no supera la permitida y donde sea más elevada, habrá refuerzo».

¿Para cuando la vieja normalidad? Eslava es clara: «Dudo que este año se quiten las mascarillas». Al margen de esa advertencia, este año esa tranqulidad parece haber llegado a los padres que se muestran menos asustados.