La Policía Nacional registra la planta de reciclaje de Estepa por sorpresa

Los agentes llevan semanas practicando diligencias sobre este posible fraude a instancias de la Fiscalía , que recibió una denuncia de un empleado con una amplia documentación. Hasta ahora, todas las acciones policiales se han llevado en secreto, pero tras publicar ABC los detalles del escándalo se han precipitado algunas diligencias.

Las mismas fuentes explican que los trabajadores del Consorcio de Estepa recibieron ayer a una decena de efectivos, que iban acompañados de una persona especialista en este tipo de plantas de reciclaje.

No obstante, ayer la central estaba funcionando con normalidad y en las zonas de tratamiento no se detectaron grandes anomalías, pero sí se constató que existe un vertedero de grandes dimensiones, dispuesto a ser de nuevo cubierto de tierra, en el que los residuos están despositados sin tratar. Es decir, la planta cuenta con todos los sistemas activos para llevar a cabo su actividad correctamente y cuando los operarios realizan la selección, el proceso es correcto. Sin embargo, esto no siempre se hace y se entierra mucha basura sin manipular.

Un informe pericial determinará ahora el porcentaje exacto de basura sin procesar que se deposita en la balsa teniendo en cuenta que la tasa de reciclaje obligatoria según la legislación vigente en España es del 50 por ciento, una proporción que no se da en Estepa, donde el propio presidente del Consorcio habla de un 30 por ciento. La inspección policial llevada a cabo ayer verificó que los residuos hallados en la balsa son muy copiosos y que, como explicó ABC, se entierran en una finca de olivos.

Paralelamente, los agentes siguen recabando información sobre la gestión económica del Consorcio, en la que también hay un agujero sin justificar de al menos 1,3 millones de euros. Por el momento, la Policía investiga al presidente y alcalde de Estepa, Antonio Jesús Muñoz , y al alcalde de Casariche, Basilio Carrión , ambos del PSOE, así como a dos administrativos, al secretario y al jefe de la planta. Estos dos últimos, José Antonio Mañas y Manuel Ibáñez , son los principales responsables de los hechos que están bajo sospecha, ya que crearon una empresa que se dedica exactamente a procesar basura y a la que desde el Consorcio adjudicaron contratos.

Las diligencias practicadas están haciendo también el seguimiento a otras sociedades de estos dos directivos de la planta de reciclaje, que llevan al frente de la misma varios lustros, ya que el secretario del Consorcio tiene dadas de alta ocho empresas a pesar de ser funcionario. De hecho, es también interventor del Ayuntamiento de Algámitas, uno de los 17 pueblos que componen el Consorcio.

La Policía se llevó ayer toda la información disponible en las instalaciones y en los próximos días trasladará las conclusiones a la Fiscalía para que tome nuevas medidas.