Sevilla frena los nuevos modelos de transporte que cubrirían sus carencias en movilidad

En Sevilla existen ya alternativas a los tradicionales taxis, con Cabify, así como servicios de alquiler de motos por minuto —Muving— y de bicicletas —con Sevici y la nueva Don Cicleto , para el aparcamiento privado—. Por otro lado, para los propios taxistas, aunque el Ayuntamiento no cuenta con una aplicación especial, existen plataformas como MyTaxi que permiten solicitar una carrera desde el móvil.

Mariano Silveira , el director general de Cabify en España asegura a ABC de Sevilla que, después del año y medio que lleva su plataforma funcionando en la ciudad, «la evolución es muy positiva, aunque debería haberlo sido mucho mayor si no fuera por las restricciones». Silveira considera que en Sevilla se ha encontrado más problemas que en otras ciudades de España por la «conduntente» respuesta del Instituto del Taxi que, desde su aterrizaje en otoño de 2016, «ha sido muy conflictivo». Esta presión ha llevado, según él, a que el Ayuntamiento se resista a la hora de favorecer su expansión en una ciudad que está «más atrasada en movilidad» que otras grandes capitales españolas. No obstante, por parte de los usuarios «la acogida ha sido brutal» , indica el director general de Cabify, ya que es «uno de los lugares donde más crece la demanda, que no podemos cubrir porque no tenemos más licencias».

La flota de Cabify, pese a los «cientos de miles» de usuarios que tiene la aplicación, apenas llega a los cien vehículos en Sevilla . Para Silveira, esto además frena la creación de puestos de trabajo, ya que cada vez son más las empresas de transporte —son ya 400 en todo el mundo— que se adhieren a su servicio, pero que en el caso de Sevilla no crecen. En este sentido, cree que la clave del éxito de Cabify en Sevilla está en la inexistencia de alternativas al transporte público tradicional, «que ha llevado a una situacion de monopolio en zonas como el aeropuerto o Santa Justa, sin ni siquiera mejorar la calidad del servicio al no tener competencia». Por ello, afirma que «el usuario se decanta por lo que más le gusta, y el sevillano, acostumbrado ya a gestionar su vida a traves de aplicaciones móviles, es exigente».

El Instituto del Taxi aún no ha lanzado la app anunciada y son muchos los taxistas oficiales los que se han adherido a la plataforma MyTaxi , que es un servicio online privado pero que, sobre todo en fines de semana o grandes eventos, tiene grandes carencias.

Desde Cabify prevén que antes del verano concedan «una buena cantidad de licencias VTC», que supondrá «un crecimiento muy importante» .

En Sevilla, la forma más común de moverse en transporte público sigue siendo el autobús, ante la inexistencia de una red de metro apropiada para una ciudad cuya área metropolitana es de un millón y medio de habitantes. Esto obliga a que el transporte privado sea imprescindible y, a su vez, la oferta de aparcamientos públicos en la ciudad es pobre, lo que ha hecho que en apenas siete años se haya incrementado un 20 por ciento el precio de los parkings, que están además completamente saturados.

Sin embargo, para paliar esta carencia, nuevas plataformas como Muving o Don Cicleto han visto un nicho de mercado a explotar en la capital hispalense. La primera, desde su implantación hace un año, ha aumentado exponencialmente su flota y es cada vez más común encontrar usuarios de ciclomotores amarillos de alquiler por la ciudad. Se trata de un servicio que, mediante el móvil, geolocaliza la posición de las motos aparcadas, las reserva y cobra por el uso. La tarifa por minuto es de 0,21 euros y 0,10 la parada, en estacionamientos autorizados (cualquier aparcamiento de moto). El director de Marketing y Comunicación de Muving, Miguel Ángel Martínez , indica a este periódico que «Sevilla es de las ciudades en las que mejor funciona el servicio». Tanto es así que, cuando se implantó la plataforma en mayo de 2017 tenía 50 motos y, ahora, ya son 200. Para julio se espera que se amplíen a 300. «En la actualidad tenemos en la ciudad 26.000 clientes y una media de 100 altas diarias», apunta Martínez.

Otra de las alternativas al vehículo privado que en Sevilla se ha asentado es la bicicleta. Primero, con el servicio municipal Sevici que lleva una década en funcionamiento, pero tambiénse se ha popularizado el uso de las bicicletas personales. Para responder a la carencia de aparcamientos seguros en la calle y para ofrecer una opción a aquellos sevillanos que no tengan un lugar donde dejar su bicicleta en casa, se ha implantado la plataforma Don Cicleto . De la mano de Aussa, desde octubre de 2017 tiene ya dos parkings en Sevilla : uno en el Mercado del Arenal y otro en José Laguillo . Alicia del Río, cofundadora de este servicio que funciona también en Madrid, Barcelona y Zaragoza; explica que ofrecen plazas fijas y otras con pago por uso por hora a través del teléfono. Estas plazas, ubicadas dentro de aparcamientos de coches, son cerradas y se accede a ellas mediante un código, por lo que «siempre tenemos constancia de quién hace uso de ella, con cámaras de seguridad y seguros en caso de robo de hasta 3.000 euros por bicicleta». El precio por franja horaria es de 0,50 euros las dos primeras horas, 1,5 de dos a cuatro y 3,5 euros las 24 horas. Las plazas fijas tienen un coste de 20 euros mensuales.

Del Río explica que ha tenido «muy buena acogida por parte de la Administación», pero que de momento no son muchos los usuarios en Sevilla dada las carencias que tiene la ciudad, donde no se ha desarrollado como en otros lugares de España cuestiones como el reparto de mercancias en bicicleta.