Los Servicios Sociales iniciaron el seguimiento del bebé en coma tan sólo días antes de su ingreso

Según la Asociación Española de Pediatría, este síndrome tiene una incidencia mundial de 20-25 casos por cada 100.000 niños menores de dos años. En España, de los 450.000 niños nacidos al año (2014), unos 100 pueden padecerlo. Cuando se zarandea con fuerza a un bebé su cerebro, que está en fase de desarrollo, golpea las paredes del cráneo. En menos de cinco minutos los daños cerebrales pueden ser irreversibles.

El bebé ingresado en el Virgen Macarena sólo pesó un kilo y medio al nacer de forma prematura mientras su madre estaba en la cárcel, por lo que fue trasladado a un centro sanitario. Cuando la progenitora salió de prisión, le entregaron a su hijo , que ya estaba recuperado.

Los padres no lo llevaron a los controles habituales con el pediatra. Si bien, no fue hasta hace unos días cuando la familia entró en los casos de seguimiento de los Servicios Sociales municipales. Según confirmaron fuentes del Ayuntamiento, desde el hospital les avisaron de que el pequeño podía no estar recibiendo los cuidados necesarios y se activó el protocolo . Las mismas fuentes aseguran que no se alertó de una posible situación de malos tratos porque en ese caso, los facultativos habrían avisado a las autoridades policiales como hicieron el pasado lunes.

Ese día, el pequeño fue atendido en el hospital, hasta donde le llevó el padre, de origen colombiano, de 19 años y con antecedentes por robos. Fuentes del centro han confirmado que está en la UCI del área de Pediatría y no han querido aportar más datos para preservar la identidad del menor. Si bien trascendía a los medios que está en coma por los daños cerebrales que sufre.

Desde el hospital dieron la voz de alerta dada la gravedad de las lesiones. Fuentes policiales han confirmado a ABC que el martes se producía la detención de los padres. La madre, de nacionalidad española y también con antecedentes, fue citada a dependencias policiales y acudió en compañía de su pareja. La Policía ya tenía en su poder el testimonio de un testigo y los informes médicos que acreditaban que el pequeño podría haber sido víctima de malos tratos. Al llegar la pareja, procedieron a su arresto. El padre en calidad de autor material y la madre por haberlo supuestamente consentido.

Ambos progenitores presentaron un 'Habeas Corpus', un procedimiento jurídico mediante el cual cualquier ciudadano puede comparecer inmediatamente ante el juez para que determine sobre la legalidad del arresto. Sin embargo, el juzgado de guardia le ha denegado esa iniciativa. Este movimiento ha retrasado las diligencias policiales que serán entregadas en el juzgado de Instrucción nº 6.

La pareja ya ha pasado este jueves a disposición judicial . La investigación la ha asumido el Grupo de Homicidios del Cuerpo Nacional.

Los detenidos son vecinos de la barriada del Cerezo, donde ocupan una vivienda . Es una zona del Distrito Macarena que está a un paso del hospital donde fue llevado este lunes el pequeño. Es un barrio con fuerte presencia de inmigrantes que curiosamente está al lado de la heladería que fue escenario del crimen recientemente enjuiciado en la Audiencia Provincial .