El Puerto de Sevilla licita una terminal de carga para el desalojo del muelle de Tablada

El presidente de la institución, Rafael Carmona , ha avanzado en rueda de prensa que el proyecto lo desarrollará un adjudicatario privado en una parcela de 20.000 metros cuadrados para mover mercancías en este suelo, donde ya opera la empresa Sevitrade. «Esta terminal atraerá a la inversión y pone las bases para que las empresas que siguen trajanado en Tablada vayan desplazándose, porque esa es la estrategia del Puerto».

Carmona reconoce que «no es una operación a corto plazo», pues la nueva terminal de carga no es una solución definitiva, pero sí marca el camino. La inversión que ha calculado ronda los cuatro millones de euros sólo en la obra civil , que estará terminada en un plazo de dos años. Si nada altera los plazos, las ofertas se recibirán hasta el próximo 16 de diciembre y en febrero se aprobará en un nuevo consejo de dirección la mejor de las propuestas.

El enclave es muy atractivo, pues se encuentra junto a los nuevos viarios que ha construido el Ministerio de Fomento por el interior del Puerto que canalizarán parte del tráfico del puente del Centenario mientras duren las obras de ampliación. Estos ramales conectan directamente con la SE-40, cumpliendo así una de las reivindicaciones de la Autoridad Portuaria. Igualmente tiene a escasa distancia el tren por el que se podrá sacar la mercancía.

La dársena del Cuarto es el nuevo espacio de desarrollo de los muelles. Con una extensión baldía equivalente a catorce campos de fútbol, será el lugar que albergue la operativa de carga, descarga y almacén una vez que se liberen los espacios más cercanos a la ciudad como el muelle de Tablada. Ese suelo, supone una oportunidad de la ciudad para crecer por el sur y la intención es crear un muelle empresarial y de ocio en el suelo portuario, con la rehabilitación de las naves regionalistas y los tinglados que están situado frente al cantil. Justo allí se trasladará la terminal de cruceros, ganando espacio de atraque.

En esa acera de la avenida de Las Razas habrá oficinas, tiendas y locales de restauración, que conectarán con el otro lado , donde se abrirá una calle al público y un paseo con vistas al Guadalquivir. En la acera opuesta está pensado la creación de un polo tecnológico donde se instalarán empresas y centros de investigación de este ámbito . En esas parcelas, hoy infrautilizadas, se prevé también la construcción de un hotel y negocios de hostelería y restauración, revitalizando así una de las principales entradas de la ciudad.

Una de las ventajas de este suelo es que no está considerado dominio público marítimo terrestre y, por tanto, se puede enajenar en una subasta pública, permitiendo a los inversores ser propietarios . La zona había generado un enorme interés, pero la pandemia de Covid-19 ha frustrado esos planes iniciales. De hecho, la Autoridad Portuaria, que esperaba tener una valoración de los terrenos e iniciar el trámite a principios de este año, ha retrasado los plazos y ha elevado una consulta al Consejo de Ministros para que dé el visto bueno a la operación, aunque el asunto no ha llegado a incluirse en la agenda de la Moncloa.

La tercera pata de este proyecto es el desarrollo de Sevilla Park , que irá en la orilla derecha, sobre los terrenos del Batán. Este proyecto vuelve a estar en el aire después de que la promotora haya decidido replantearlo ante el nuevo escenario económico y los competidores que han aparecido mientras se tramitaba el proyecto. El plan es mantener el auditorio, que será uno de los mayores de Europa, pero reorientar el complejo comercial hacia usos turísticos y de ocio , como avanzó ABC, aunque todavía no se ha hecho una propuesta en firme para ello. Inevitablemente la crisis del Covid-19 va a afectar de lleno a esta iniciativa, que lleva más de una década anunciada.