Entrevista
«Nunca me discriminaron por ser mujer y no quiero ningún privilegio sobre los hombres por serlo»
María Japón, catedrática de Análisis Matemáticos y subdirectora del Instituto de Matemáticas de la Universidad de Sevilla, destaca la «gran cantera de mujeres matemáticas en Sevilla y una explosión de nuevas alumnas»
«No se puede ganar una guerra sin saber matemáticas»

Gracias a una beca de investigación, la matemática sevillana María Japón Pineda , pudo realizar su tesis doctoral mientras ganaba su primer sueldo. Catedrática de Análisis Matemáticos por la Hispalense, ha sido nombrada recientemente subdirectora del Instituto de Matemáticas de la Universidad de ... Sevilla (IMUS). Presume de preparar muy bien sus clases y estudiar bien todos sus problemas de investigación: «Afortunadamente todos mis problemas son matemáticos», dice. Su curiosidad por resolverlos le ha llevado a a experimentar nuevas técnicas o instrumentos de los que ha dejado constancia en numerosas publicaciones. Dice que descubrió «youtube» mucho más tarde que sus hijas, y que es «una herramienta maravillosa». Considera que su profesión es la mejor del mundo y trabaja en este momento en la «teoría de punto fijo en espacios de dimensión infinita».
¿Le gustaban las matemáticas de pequeña?
En general, siempre fui buena estudiante pero en el instituto me di cuenta de que las matemáticas me resultaban mucho más fáciles de entender que a otros compañeros. Eran como un juego, en el que vas aprendiendo a engranar piezas de un rompecabezas creando figuras o estructuras que a la vez sirven de base para crear otras más complejas. El puzzle se extiende con nuevas configuraciones que abren inéditos caminos por explorar.
¿Tenía claro entonces que sería matemática?
No tenía tan claro comenzar la Licenciatura de Matemáticas y pensaba que nunca podría llegar a donde estoy ahora cuando empecé la universidad como alumna. Soy la mayor de cuatro hermanas y mis padres no pudieron terminar el colegio porque tuvieron que empezar a trabajar casi desde niños. No tenía un referente universitario y finalmente decidí estudiar matemáticas con muchas inseguridades pero animada porque una amiga se embarcó conmigo en el camino. Con el tiempo, me di cuenta que hay que ser valientes y tomar tus propias decisiones e incluso perder el miedo a equivocarte, porque la experiencia y el éxito se consiguen a base de errores y superaciones en el camino.
¿En sus clases le han dicho alguna vez sus alumnos «no me entero...»?
Existe el rumor infundado de que las matemáticas son un mundo abstracto casi imposible de penetrar. Yo siempre les digo a mis alumnos que tienen que preguntar cada vez que no se enteren de algo y esto forma parte de la mecánica diaria de la clase. En otro caso, impartir docencia sería muy aburrido. Afortunadamente, en los últimos años he impartido docencia en grupos reducidos y eso hace más fácil un acercamiento más personal con la mayoría de los alumnos.
¿Tener un buen profesor de Matemáticas en el instituto puede ser la diferencia entre el cielo y el infierno académico?
El profesorado de secundaria juega un papel fundamental en como los alumnos perciben las matemáticas. Tengo dos hijas que han pasado por secundaria hace poco y creo que hay ciertos aspectos mejorables.
El catedrático y exdirector del Instituto de Matemáticas, Emilio Carrizosa, decía no hace mucho que le preocupaba el anumerismo al que puede quedar reducido gran parte de nuestra sociedad. Le preocupa que a muchos chavales les falten competencias numéricas para interpretar, por ejemplo, un gráfico sencillo sobre el paro. ¿usted también teme que pueda ocurrir esto?
Esperemos que no. Es muy importante proceso educativo en secundaria.
¿Se les dan mejor las matemáticas a los chicos que a las chicas o es más bien una cosa cultural?
A mí siempre se me dieron bien, no creo que sea una cuestión de género. Creo que a veces pecamos de intentar buscar razones donde quizás no las haya.
¿Cuántas chicas hay en sus clases?
En este curso imparto dos asignaturas del Máster Universitario de Matemáticas y aquí la proporción de alumnos es considerablemente superior al de número de alumnas. En las titulaciones de grado la diferencia es menor. Imparto además una asignatura en inglés a un grupo reducido en el Grado de Física y en este curso, el número de chicas supera al de los chicos. Lo que me parece primordial es acercar la Universidad a los alumnos de la ESO y Bachillerato. Piense que las titulaciones se nutren de alumnos que probablemente tienen grandes inseguridades en la toma de una decisión tan fundamental y es importante que entiendan que la mayoría de los profesores universitarios no somos genios salidos de otra galaxia, sino personas normales y corrientes que también tuvimos las mismas inquietudes y los sueños de hacer en la vida aquello que más nos gustaba.
¿Ha sufrido alguna discriminación en sus estudios o en su desarrollo profesional por ser mujer?
No. Y no me gusta que me pongan un cartel que diga "soy mujer y soy científica". Me da igual que me llamen científica o científico. Yo creo que todos seremos iguales cuando dejemos de hablar de esto. ¿Somos menos? Sí. ¿Hay menos alumnas en carreras de Ciencias? Sí, pero no hay tanta desproporción. ¿Que hay menos alumnas que luego se dedican a la carrera de investigadora? No digo que no haya pasado antes, pero últimamente no. Si queremos ser iguales, que no nos traten como si fuéramos diferentes.
¿Está en contra de las cuotas femeninas?
Sí. Estoy en contra de que a las mujeres se les dé preferencia en cualquier campo por el simple hecho de ser mujer. No quiero tener ningún privilegio por ser mujer y no me gusta ir a actividades en las que sólo se invita a mujeres y que se hacen sólo para mujeres. Esto me hace sentirme diferente y no me gusta. Preferiría que se invitara a científicos hombres a los institutos a enseñar a conciliar a los alumnos la vida familiar con la profesional y a que repartan las tareas domésticas al cincuenta por ciento con sus parejas.
Se habla mucho de los techos de cristal femeninos..
Supongo que habrá campos en los que sí haya aún discriminación pero no estoy a favor de cuotas femeninas. He tenido mucho más compañeros hombres que compañeras mujeres pero no creo que eso obedezca a ninguna discriminación contra las mujeres. Hablo de que me he movido siempre en un entorno universitario donde encontré mi segunda familia en la Facultad de Matemáticas. No obstante, quizás esto no pueda extrapolarse al mundo empresarial donde muchos techos de cristal ya han empezado a rasgarse y seguro que caerán pronto.
¿Se hace algo en la Universidad para aumentar la cifra de alumnas en Matemáticas y carreras científicas?
Tanto desde la Universidad de Sevilla en general como desde la Facultad de Matemáticas, la Sociedad Andaluza de Matemáticas Thales y el Instituto Universitario de Matemáticas (IMUS) se realizan actividades enfocadas a alumnos de secundaria y bachillerato para dar visibilidad a la ciencia y a las matemáticas en particular. Creo que estas acciones son fundamentales para atraer a nuestros futuros científicos, independientemente del género. Tenemos que hacer que los estudiantes interesados en las matemáticas se decidan con determinación a estudiar matemáticas como una profesión de futuro, y seguro que con un brillante éxito.
En Informática hay clases en las que apenas hay chicas. ¿Por qué?
No doy clases en Informática pero si no hay mujeres, o son pocas, me inclino a pensar que es una tendencia pasajera y que cambiará en unos años. Ahora mismo tenemos una explosión de alumnos de nuevo ingreso en la titulación de matemáticas y el balance entre chicos y chicas tampoco difiere demasiado.
¿En qué campos está trabajando actualmente?
Trabajo en matemática teórica, concretamente en el estudio de Teoría Métrica de Punto Fijo. Dado un conjunto y una transformación del conjunto en sí mismo, es decir, una aplicación que mueve cada elemento del conjunto, un punto fijo es aquel que se queda invariante, o dicho de otra forma, se queda fijo por la transformación. Por ilustrar este concepto sobre el papel en algo que se puede explicar a un estudiante de secundaria, es imposible dibujar la gráfica de una función continua que vaya del intervalo [0,1] en [0,1] sin que corte a la bisectriz del primer cuadrante (es decir a los puntos de la recta y=x), ya que toda función continua en estas condiciones tiene un punto fijo.
¿Qué aplicaciones prácticas pueden tener estas líneas de investigación?
Para mí la investigación es fundamental. En un principio no estoy interesada en las posibles aplicaciones sino en los resultados y procesos teóricos que pueda obtener y desarrollar. En esta línea, una vez que un problema es resuelto se descubren «accidentalmente» varios problemas subyacentes que hacen que el día a día este siempre repleto de proyectos novedosos e interesantes. En la historia de las matemáticas, la mayoría de nombres ilustres han estado más interesados en resolver sus «problemas» científicos que en las aplicaciones que éstos pudieran tener. Es más, sin previsión alguna y muchas décadas después, hemos visto que estas aplicaciones se han hecho realidad gracias al progreso paralelo de otras ciencias tales como la economía, biología, medicina, informática y otras disciplinas afines. Teoremas de punto fijo pueden aparecer espontáneamente en los sitios más inesperados: como soluciones de una ecuación diferencial o integral, en teoría de juegos y economía con la existencia de equilibrios de Nash que forman parte de los fundamentos en la toma de decisiones, en la asignación del rango de una página web por el algoritmo de búsqueda de google, en métodos de optimización aplicados a la resolución de imágenes, en la construcción de fractales autosimilares.
Las matemáticas se han puesto de moda porque son fundamentales para Internet y a la computación, que son la base del mundo actual.
Sí, la explosión de las matemáticas ha sido brutal con la computación y los algoritmos. Y creo que aún está por alcanzar el pico de esa cola. Cuando yo estudié, no toqué nunca un ordenador. Ahora es algo imprescindible y el alumno se cultiva aquí programando.
El algoritmo de Google marca nuestras vidas pero tengo entendido que es bastante sencillo y se lo enseñan a los alumnos en segundo curso. ¿Cuáles son los más complejos? ¿Spotify?
El algoritmo de Google asigna un ranking a cada página web que determina la posición en la que son mostradas por el buscador. Este algoritmo está basado en la cantidad de links que cada página web recibe y emite y el valor asignado del ranking a cada página se obtiene como un vector solución de una determinada ecuación matricial con dimensiones del calibre del número de páginas que circulan por la red. Un teorema de punto fijo permite asegurar la existencia de dicha solución en todos los posibles casos. No estoy segura si se enseña a los alumnos de segundo curso del grado de matemáticas, pero sería posible. Sin embargo, los algoritmos se perfeccionan y modifican constantemente. Obviamente, en el algoritmo de Google también existe una componente comercial que influye a la hora de ordenar las páginas.
¿Los algoritmos valen para todo?
Para muchas cosas. Por ponerle un simple ejemplo: si abrimos la galería del móvil, por detrás de cada foto existe un algoritmo de compresión de imágenes que permite archivarlas.
¿Puede un algoritmo ayudar a detectar una enfermedad, un cáncer, por ejemplo?
Sí. Cuando se realiza una prueba médica, tipo tomografía, se obtienen imágenes por secciones del interior del cuerpo. Posteriormente, mediante algoritmos de reconstrucción se consigue una aproximación de la realidad tridimensional. Este proceso pasa inadvertido para el paciente y probablemente para el profesional médico ya que se realiza a través del instrumento diseñado a tal efecto. Últimamente está muy de moda la geometría fractal y se ha demostrado sus aplicaciones en el estudio de imágenes médicas destinadas a la detección de células cancerígenas. Ciertas células cambian su metamorfosis cuando transmutan a cancerígenas y un estudio pormenorizado de su dimensión fractal junto con otros parámetros relacionados permite la localización de dichas células antes de que puedan ser detectadas por una lente microscópica.
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