No estudies, sevillano, afíliate

El procedimiento está perfectamente diseñado para que los políticos puedan lavarse las manos. Lo que hacen los gobiernos es subcontratar a empresas educativas para que gestionen estos talleres y, posteriormente, facilitarles los contactos de sus militantes para que los contraten. Así siempre pueden decir que son estas subcontratas las que han elegido a sus afines y no ellos mismos. Y qué casualidad que siempre escogen a los afiliados del partido que gobierna.

Muñoz dijo cuando se descubrió el enchufismo del PP que «si esta práctica se realizaba o se realiza en algún ayuntamiento, este grupo lo condena porque nosotros hemos puesto el reloj a cero ». Pero en cinco años el reloj ha corrido mucho. Como ha desvelado en estas páginas Eduardo Barba, que además de un periodista excepcional es un sevillano que repudia la ojana, desde que es alcalde Juan Espadas hay colocados en los talleres hasta varios miembros de su lista electoral. Ni siquiera se ha centrado en los militantes desconocidos, sino que no ha tenido ningún complejo para meter a sus compañeros que se quedaron tirados. Si a esto sumamos el incremento de asesores que se ha producido en el Ayuntamiento para volver a dar trabajo a la vieja guardia socialista de los tiempos de Monteseirín , y que al sumar cinco años de enchufes los monitores pasarán a ser fijos en los distritos, la moraleja para todos los jóvenes que están desesperados buscando trabajo en Sevilla, donde el paro juvenil es un escándalo, es sencilla: no estudies, afíliate. Antonio Muñoz tenía razón cuando protestaba hace ocho años. Ningún título universitario te dará tantas oportunidades como el carné del partido.