El Ministerio licita un informe para analizar la altura del puente de la SE-40

El encargo, que tiene un montante de 14.900 euros (Sin IVA) figura en la plataforma de contratación del sector público, aunque se trata de un asunto menor. El adjudicatario es Siport XXI SL , una compañía que dispone de uno de los centros de simulación de buques más grandes de España y que ha trabajado para los principales puertos del país.

El motivo sería comprobar al altura mínima que debe tener un viaducto sobre el río para no afectar al tráfico marítimo. Con ello se podría defender el proyecto de puente ante el rechazo de instituciones como la Autoridad Portuaria que es una de las que más ha opuesto a esta solución técnica para el cierre de la SE-40 y sigue defendiendo la vuelta al proyecto original de los túneles que no tiene ningún tipo de afección. La alternativa que presentó el director general de Carreteras, Javier Herrero , cuando anunció la cancelación los contratos de los túneles fue la de un puente de al menos cincuenta metros de gálibo, que es la altura entre la parte inferior de la infraestructura y el nivel medio del curso de agua. La referencia no era otra que la del puente del Centenario que se construyó en 1991 y que ya pone una puerta al tráfico de buques.

No obstante, la institución que gestiona el Puerto sevillano viene recordando que el Centenario dejará de ser un obstáculo para la entrada de barcos más altos cuando toda la actividad se desplace hacia el sur, un plan en el que ya está inmersa con la licitación de la nueva terminal de carga en la Dársena del Cuarto . Será allí donde se concentren los trabajos más pesados, dejando los muelles que están más cercanos a la ciudad para otros usos. Por eso mismo lamenta que «la construcción de un nuevo puente en el curso de los buques vuelva a ser una limitación para el crecimiento en el futuro», como ha manifestado el presidente de la APS, Rafael Carmona, en varias ocasiones.

El encargo ahora de este estudio llama la atención y es posible que sea una de las patas del informe de alternativas en el que trabajan las ingenierías Ayesa y Fhecor que debe ofrecer una respuesta esta primavera si se cumplen los plazos que recoge el contrato que firmaron el pasado junio. Será a partir de esta respuesta cuando se empiece a redactar el anteproyecto del tramo. El contrato recién adjudicado tiene un plazo de ejecución de dos meses, con lo que las conclusiones deben estar en las mismas fechas que el trabajo de las consultoras antes mencionadas.