Ferraz aprieta con María Jesús Montero como candidata en Sevilla y Espadas retrasa su decisión

La negociación con la dirección nacional del partido está abierta y se resolverá en las próximas horas. Según ha podido confirmar ABC de fuentes socialistas está prácticamente acordado que Muñoz sea el designado para ambos cometidos, el de alcalde temporal y el de candidato, ya que los dirigentes de la formación entienden que no sería una buena estrategia colocar ahora a un regidor temporal y luego solaparlo con otro candidato externo. Además, Montero no tiene buena imagen en Sevilla, a pesar de que es su tierra, porque tanto como consejera de Hacienda de la Junta como en su condición de ministra ha perjudicado a la ciudad en los presupuestos, lo que daría la campaña hecha al PP. Espadas va a echar el resto en favor de Muñoz porque lo considera su concejal más solvente y porque prefiere a Juan Carlos Cabrera, el otro aspirante a sucederle, en tareas orgánicas para movilizar a la militancia de cara a las próximas elecciones autonómicas. Cabrera ha dejado caer entre sus colaboradores cercanos que se marchará también del Ayuntamiento junto con el alcalde para evitar aparecer como el perdedor de la disputa, pero Espadas le ha pedido que continúe al frente de Movilidad y, sobre todo, Fiestas Mayores , un terreno en el que Muñoz es más frágil.

No obstante, el sucesor también ha pedido tener carta blanca para diseñar su equipo cuando asuma el mando. Su idea es retocar poco el actual organigrama, pero está obligado a hacer algunos cambios para redistribuir mejor las funciones. Él ya no podrá seguir siendo delegado de Hábitat Urbano, Turismo y Cultura , tiene que delegar estas funciones en otros compañeros. Y la concejal que entra en el puesto de Espadas, la número 14, Amelia Hernández, no tiene experiencia para asumir tanta responsabilidad. Muñoz tiene un grupo de confianza formado por Juan Manuel Flores, Adela Castaño y Juan Antonio Barrionuevo . Si finalmente se cierra su designación, lo lógico es que sus actuales cometidos se repartan entre estos tres y que Cabrera conserve todas sus competencias. Pero eso sólo ocurrirá si Ferraz acepta las condiciones de Espadas y Montero queda totalmente descartada como candidata.