La falta de dosis obliga a cerrar la vacunación por la tarde en el estadio de la Cartuja este martes y mañana miércoles

De hecho, esa falta de suministro, que deben enviar el Gobierno de la nación a Andalucía y la comunidad repartir por las respectivas provincias, tendrá sus consecuencias en el ritmo de inmunización de los sevillanos. El estadio de la isla de la Cartuja, que se convirtió en vacunódromo hace ya algunas semanas con el objetivo de alcanzar la máxima velocidad e incrementar el ritmo de la inmunización de la población, tendrá que cerrar por la tarde.

Según han admitido desde la Consejería de Salud, esa falta de dosis provocará que el vacunódromo cierre al menos dos tardes esta semana. Será hoy por la tarde y mañana . Desde el departamento que dirige Jesús Aguirre, califican lo ocurrido como una « reorganización en función de las dosis que llegan» y aseguran que, para contrarrestar se amplía el horario de mañana en estas instalaciones.

Es decir hoy y mañana se comenzará con la administración de las dosis a las 8 de la mañana, en lugar de a las 9 como se había hecho hasta ahora. Pero también se cortará por la tarde y no se prolongará este horario hasta las siete de la tarde como se ha venido haciendo en el estadio de la Cartuja durante semanas. La justificación que dan desde Salud es esa falta de fármacos.

«No hay dosis para todas las horas del día pero sí para organizarlo durante más horas en la mañana», aseguran. Con ello además se evitan las horas de la tarde, las de más calor para las personas que tienen que esperar en las puertas del estadio olímpico con las altas temperaturas de los últimos días y que provocaron más de una crítica por ello.

De hecho esa ralentización ya comenzó a notarse durante la pasada semana en las cifras de Sevilla. Desde el lunes 5 de julio hasta el pasado domingo se han administrado en la provincia algo más de 134. 000 dosis de vacunas. Si se compara la cifra con las que había un lunes antes, el resultado es que en la semana anterior se administraron más de 175.000 dosis. Y eso significa una importante ralentización que se produce justo en el momento en el que los contagios (sobre todo entre la población más joven) parecen estar disparados y ya hay quien habla incluso de quinta ola.

Hay que tener en cuenta además que durante la semana pasada, de las más de 134.000 vacunas que se administraron, una gran mayoría, más de 100.000 eran la segunda dosis para completar la pauta ya se citó a muchos a los que había que inocular con la segunda de AstraZéneca.

Y ello ha hecho que no se haya avanzado demasiado en los últimos días en el número de personas inmunizadas ni tampoco en los grupos de edad a los que se ha llegado pese a que se hicieron durante varios días llamadas masivas para recaptar a personas que no habían sido inmunizadas aún . Porque queda un 11 por ciento de personas entre los 40 y los 69 años que aún no han sido inmunizadas contra la pandemia.

Ahora, sin embargo desde Salud se asegura que de las vacunas que se van a inocular en los próximos días, una gran mayoría serán primeras dosis, lo que supondrá un avance. Eso coincide con el anuncio que se hizo ayer de que se abren a partir de hoy nuevas franjas de edad y que empiezan a llegar a los veinteañeros. De hecho se abren a vacunas los años 90, 91 y 92. Lo que supone traspasar la barrera de los treinta y entrar en los que tienen incluso 29 años. Con todo, de cómo evolucione la administración del antídoto en los próximos días dependerá la incidencia de la pandemia en un momento en el que, con el mes de agosto en puertas, preocupa que haya que recurrir a nuevas restricciones.