El aumento de contagios de coronavirus en Sevilla frustra el regreso a las oficinas

La ocupación en los grandes edificios de oficinas sigue siendo baja. Un ejemplo claro es Torre Sevilla , donde acudían a diario 1.800 profesionales antes de la crisis sanitaria y ahora ni siquiera llegan a la mitad. Fuentes de la empresa que gestiona este edificio aseguran a ABC que «la ocupación actualmente fluctúa entre el 40 por ciento y el 45 por ciento» .

Las fuentes consultadas aclaran que «las empresas instaladas en las 18 plantas tienen un marcado carácter tecnológico, con lo que cumplen con el perfil más idóneo para que sus empleados puedan teletrabajar. No obstante, están apostando por una presencialidad notable y es por los servicios de valor añadido que ofrece el edificio». En el rascacielos se han creado itinerarios de entrada y salida, nueva señalización, accesos escalonadas en los tornos y dispensadores de mascarillas y geles en distintos puntos, así como una limpieza más exhaustiva, como explican desde la empresa promotora de este equipamiento.

El teletrabajo vuelve a imponerse en recintos como la Cartuja , donde hubo un notable regreso de trabajadores desde mediados de septiembre. El mejor indicador son los aparcamientos, que volvían a ser escasos en las jornadas laborables. Desde la declaración del nuevo estado de alarma el pasado domingo hay más espacios libres en la calle y menos afluencia de clientes en los negocios de hostelería, que habían retomado la actividad al completo. Actualmente trabajan 18.400 personas en el parque tecnológico, incluidos los estudiantes que acuden a a las facultades de la Hispalense y a los centros universitarios privados que allí se encuentran . Sin embargo, los desplazamientos diarios son muchos menos que hace un año . Jorge Diz Morón , el gerente del Círculo de Empresarios del recinto, señala que «se ha hecho un importante esfuerzo para garantizar la seguridad en las oficinas para que los empleados puedan volver».

«Desde que se levantó el confinamiento ha habido de todo: compañías que tienen a toda la plantilla en presencial, otras que han propuesto un sistema mixto con parte de los equipos en casa y otros en la oficina y los que han dejado un retén y la mayoría está fuera», comenta. Así están operando algunas multinacionales que tienen sede en Madrid o Barcelona y que aplican los mismos criterios a todos sus centros de trabajo.

Sobre la posibilidad de que se vuelva a mandar a los asalariados a sus domicilios comenta que «va a depender mucho de la evolución de la pandemia y de la productividad . Diz señala que «en algunos casos se ha resentido y ha habido que incorporar al personal y en otros, se ha mantenido, permitiendo esos modelos mixtos o con todos en teletrabajo». Así se lo han traslado los responsables de una treintena de firmas desde el pasado mes de septiembre.

Según sus cálculos, desde el verano se habrá incorporado algo más de un 50 por ciento de las plantillas del parque tecnológico. La ocupación también ronda el 50% por ciento en el entorno de Nervión, donde tienen sede numerosas firmas en los edificios Viapol , Sevilla 1 , Sevilla 2 y Catalana Occidente . En esta zona ha habido un regreso mayor de empleados de pymes y micropymes, pero las grandes corporaciones siguen manteniendo el modelo de teletrabajo, como es el caso de Fujitsu, que fue la primera en incorporarlo. La multinacional todavía no tiene planes de recuperar la presencialidad y ha reforzado los equipos para seguir funcionando de manera telemática , una alternativa que «ha llegado para quedarse», explican fuentes de la compañía.

Uno de los centros que mayor nivel de ocupación tiene es el edificio Sevilla 2, donde la mayoría de sus inquilinos son empresas o delegaciones de tamaño reducido. Tres cuartas partes de los asalariados han regresado a las oficinas para continuar con la actividad con normalidad y no se espera que retomen el teletrabajo si no se ordena el confinamiento estricto como en marzo.

Las consejerías de la Junta de Andalucía acogen también un importante número de funcionarios y empleados públicos que tuvieron que seguir desde casa con sus funciones cuando se declaró la pandemia. No obstante, se produjo una incorporación progresiva en grandes centros como Torre Triana y el edificio situado junto a Santa Justa. En conjunto, algo menos de un tercio de los trabajadores públicos siguen operando desde sus domicilio , sin embargo, el grueso de las plantillas son las del ámbito sanitario y educativo, que tienen que presentarse en hospitales, centros de salud, colegios e institutos.

La administración aún no ha establecido un criterio ante el aumento de contagios. Mantiene un control exhaustivo de los servicios propios y plantea cuarentenas de todos los contactos cercados cuando se detecta un positivo.