#ArchivoABCsev: Un paseo por la historia del Parque María Luisa desde las imágenes del archivo de ABC

Qué mejor lugar para despejarnos, liberar la mente y disfrutar de la naturaleza sin salir de Sevilla que el Parque de María Luisa. Sin duda, deberíamos tomarlo como un tesoro: 34 hectáreas de frondosa vegetación, fauna en libertad, hermosas plazas donde pasar el rato, elementos decorativos e historia. Una auténtica joya en el centro de la ciudad. Como cada viernes, buceamos en el pasado de nuestra tierra y esta vez rescatamos fotografías históricas de los orígenes del parque. Por este rincón han pasado nuestros padres y abuelos, y ahora podemos ver cómo lo conocieron ellos a través de las valiosas instantáneas del Archivo Gráfico de ABC de Sevilla.

Para quienes desconozcan la historia del parque, tienen que saber que en los inicios eran unos jardines privados . Los Duques de Montpensier adquieron los terrenos a mediados del siglo XIX , pero el 19 de junio de 1893, la infanta Maria Luisa, viuda de Montpensier, regaló gran parte de los jardines a la ciudad de Sevilla para hacer un parque público. A este se le unió la «Huerta de Mariana», que no era una huerta sino un jardín, la de la Marquesa de Nervión y la huerta de los Caminos.

Tal y como cuenta el libro «Las calles de Sevilla» de José María de Mena (ed. Castillejo), el todo fue confiado al jardinero y paisajista francés Jean-Claude Nicolas Forestier , que convirtió el paraje en el hermosísimo parque que conocemos hoy en día. Además, con motivo de la Exposición Iberoamericana de 1929 éste se vio enriquecido gracias a la construcción de la Plaza de América, la Plaza de España y del resto de glorietas y edificios; lo que hizo del parque el orgullo de Sevilla e inspiración para poetas y artistas.

La imagen más antigua que hemos encontrado que atesora el archivo es de 1915 , un año después de que el parque fuese inaugurado. En ella, tomada por el fotógrafo Ramón Alba, vemos a los reyes Alfonso XIII y Victoria Eugenia paseando por una de las avenidas. El monarca es el caballero que está junto a un árbol a la izquierda de la imagen y la reina camina bastante cerca y se cubre del sol con una sombrilla de color oscuro. La foto está tomada en febrero, concretamente el día 28, por lo que suponemos que el atuendo es más protocolario que necesario.

La segunda imagen que destacamos por antigüedad, tomada en 1921,

es esta del monumento a Gustavo Adolfo Bécquer, obra del escultor Lorenzo Coullant Valera pero iniciativa de los hermanos Álvarez Quintero. Este enclave, además de ser una de las glorietas más famosas del parque por belleza y composición, es un el rincón favorito de muchos enamorados. Como detalle curioso, su construcción fue uno de los primeros «crowdfunding» de la historia : escribieron la obra «La rima eterna» y la representaron por España y América para recaudar fondos. Debido a la gran acogida popular «al final sobró hasta dinero», aseguran los cronistas de la época.

Continuando con nuestro paseo, entre la avenida de Pizarro y el Paseo de las Delicias, y nos topamos con la Glorieta de Ofelia Nieto , que data de 1935. Esta imagen es de Cecilo Sánchez del Pando y fue tomada en 1942. Ofelia Nieto Iglesias fue una soprano madrileña y su glorieta, diseñada por el arquitecto Juan Talavera y Heredia, es de estilo regionalista andaluz. A la homenajeada la vemos en un azulejo acompañada por dos figuras alegóricas que representan a la música y el canto . Como curiosidad, por toda la glorieta hay pequeños azulejos donde se leen nombres de compositores y de óperas.

La siguiente parada la hacemos en un lugar que está relacionado directamente con este periódico: la Glorieta de Luca de Tena . Torcuato Luca de Tena y Álvarez Ossorio era célebre en la ciudad por su vinculación personal con Sevilla y por haber sido editor de ABC. En un terreno llamado «El Macetero», porque se dedicaba al cultivo de plantas ornamentales en macetas de cerámica, se levantó este pabellón con pérgolas en homenaje al periodista . Al igual que otras zonas del recinto, durante muchos años ha albergado libros que los transeúntes podían detenerse a leer, y ésta en particular se convirtió en una modesta biblioteca que también tenía periódicos.

En una de las imágenes que los rescatamos se muestra el momento de la inauguración de la glorieta en el año 1954. En ella, el alcalde del momento, Marqués de Contadero, pronuncia un discurso durante el acto.

Para terminar nuestro paseo, nos detenemos en los elementos que le dan frescura y cierta musicalidad al Parque de María Luisa: las fuentes. El paisajista francés que transformó los jardines palaciegos en jardín público hizo bien adaptando su obra al clima y al paisaje de Sevilla . Influenciado por sus viajes, tomó detalles de la Alhambra de Granada, del Generalife, del Retiro de Madrid y del propio Alcázar de Sevilla ; consiguiendo a través del azulejo y del agua unir belleza y frescura al entorno. Gracias a ello, muchos rincones del parque recrean la intimidad de los patios andaluces en un parque público.

Esperamos que, tras este paseo virtual e histórico, se acerquen al parque para hacerlo realidad. Aprovechen las breves horas de sol que el otoño nos regala, y las que están permitidas, para disfrutar un poco más de nuestra ciudad y redescubran este tesoro sevillano.