Acepta cinco años de cárcel por delitos sexuales contra quince menores y evita los 109 años que pedía el fiscal

Según han informado fuentes judiciales a Efe, la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Sevilla ha dejado este lunes visto para sentencia el juicio contra J.J.A.S., para quien el Ministerio Público solicitaba 68 años en total por catorce delitos de elaboración y exhibición de material pornográfico con utilización de menores , diez años por un delito de abusos sexuales sobre uno de sus hijos y doce años por cuatro delitos de abusos sexuales.

También reclamaba trece años y seis meses por tres delitos contra la salud pública con sustancia que no causa grave daño a la salud, dos años por dos delitos de corrupción de menores , en estos casos sobre sus dos hijos, 14 meses por dos de estos delitos en grado de tentativa, otros dos años por un delito de amenazas y un año por exhibición de material pornográfico entre menores.

Antes de la vista oral, la fiscal y la defensa han alcanzado un acuerdo por el que se le aplican las atenuantes de dilación indebida, ya que los hechos datan de 2006 , facultades psicológicas alteradas y reparación del daño, una vez que J.J.A.S. ha abonado 1.500 de los 60.000 euros de la responsabilidad civil, aunque el juez ha indicado que «es una pequeña cantidad para todo lo que tiene que pagar».

La Fiscalía ha sustituido trece delitos de exhibición de pornografía con utilización de menores del artículo 189 por otros tantos de exhibicionismo del artículo 186, con una pena de dos meses de cárcel por cada uno, y ha dejado en un año y nueve meses el castigo para el abuso sobre el hijo del acusado.

Respecto a los otros cuatro episodios de abuso sexual, ha acordado tres meses de reclusión por cada uno de dos de ellos y ha reducido los otros dos a tentativa, con dos meses de prisión por cada uno, mientras que las amenazas han bajado de delito a falta sancionada con una multa de 20 euros. Además, ha retirado la acusación por los delitos contra la salud pública y corrupción de menores.

Según fuentes de la Fiscalía, el escrito provisional se correspondía con el Código Penal anterior a la reforma de 2015 y la calificación definitiva casa mejor con los hechos, juzgados después de una instrucción que duró diez años.

«Me arrepentiré toda mi vida», ha dicho el procesado en el uso de su derecho a la última palabra , en el que ha añadido que lo ocurrido se debió a «un tratamiento» que tuvo contra la ansiedad que, según ha reconocido la fiscal, «puede derivar en la dificultad para controlar los impulsos».

Los hechos ocurrieron en Brenes en la Semana Santa de 2006 , cuando el acusado se quedaba a solas con sus hijos y con varios amigos de estos, la mayoría adolescentes, y les hacía fotografías para luego confeccionar montajes en los que sus caras aparecían colocadas sobre cuerpos de adultos.

Respecto al abuso sobre uno de sus hijos , el acusado ha reconocido que se «abalanzó» sobre él para efectuarle tocamientos. También ha admitido que a un sobrino lo «empujó a la cama» en una cabaña de su propiedad con el mismo fin, aunque no llegó a conseguirlo.