La Academia de Medicina rinde homenaje a Hugo Galera Davidson

Tras la presentación de la sesión a cargo del presidente de la corporación, Jesús Castiñeira Fernández , intervinieron los doctores Jesús Locertales, Juan Bautista Alcañiz, Enrique Murillo, Alfredo Matilla y Ricardo González Cámpora , quienes fueron los encargados de realizar una semblanza de la figura del profesor Galera desde la amistad, la colegiación, el compañerismo en la actividad asistencial y la enseñanza.

El doctor Jesús Locertales subrayó el «merecidísimo homenaje» del doctor que obtuvo cátedra en Sevilla en 1974. Repasó distintas facetas de su vida, destacando su «curiosidad innata por todo» y su «sentido del compañerismo». El doctor Juan Bautista Alcañiz destacó que «no se elige donde se nace, pero sí dónde poder vivir», comentó refiriéndose a quien nació en Santa Cruz de Tenerife pero «eligió Sevilla» y se integró en la ciudad, destacando que «le gustan los silencios de la Maestranza y su pasión por la navegación». Recordó que se solicitó desde el Colegio que se le concediera la Cruz de la Orden de Alfonso X el Sabio, «un ejemplo a seguir en sus múltiples facetas», dijo.

El doctor Enrique Murillo habló sobre el compañerismo en la actividad asistencial. «Demostró una habilidad negociadora poco común y gran capacidad de análisis». «nada humano le es ajeno», dijo. Fue el doctor Alfredo Matilla el encargado de repasar su trayectoria en Salamanca y Madrid. «El doctor ha sido el creador e impulsor de la Anatomía Patológica en España», subrayó, recordando su etapa en Tenerife y en el Macarena. «Un ejemplo de inquietud por la Patología Avanzada y moderna».

Su discípulo, el doctor Ricardo González Cámpora habló sobre «el modelo profesional a seguir». «Sentó las bases de la Anatomía Patológica actual. Notablemente exigente en el campo profesional y muy próximo en el terreno afectivo». Un emocionado Hugo Galera Davidson tomó la palabra para agradecer el acto, «un honor y motivo de satisfacción» y repasar emocionado su trayectoria, con recuerdo para su maestro, Luis Zambrano Sanabra, y científicos y paradigmas que más le habían influido a quien fue 32 años académico numerario y cuatro presidente.

«He sido feliz. A muy pocos hombres Dios le ha proporcionado tan íntima felicidad. Mis amaneceres han sido casi siempre un despertar a la esperanza» declaró antes de recibir una alegoría y concluir el acto con todos los asistentes en pie y un gran aplauso.

Entre los que no quisieron dejar de asistir al evento se encontraban también Ramón María Serrera, Enriqueta Vila, Benito Valdés, Rafael Valencia, Luis Cáceres, Alberto Máximo Pérez Calero o Alfonso Carmona , entre otros.