El Portaceli y el Claret son los colegios más demandados de Sevilla

El colegio Portaceli adelanta una larga lista de espera después de que las solicitudes recibidas sobrepasen el número de las plazas ofertadas (125). Por otro lado, es preciso remarcar las solicitudes del colegio Claret, las cuales han superado su oferta, registrando 127 para las 125 plazas activas.

En el distrito Sur, también resalta las listas de espera del colegio Montaigne, el cual para las 50 plazas ofertadas ha recibido52 solicitudes. Asimismo, en la zona de Nervión, el Vedruna tendrá exceso de solicitudes al superar en once las 75 plazas ofertadas por el centro; y el Buen Pastor, con 60 solicitudes para 50 plazas. En este último resulta interesante hacer un inciso, pues a pesar de las pocas plazas que ofrece en comparación con los dos colegios mencionados anteriormente, su lista de espera es bastante larga, hecho que subraya el éxito escolar del centro. Además, la última clasificación realizada por la plataforma Micole lo sitúa como el mejor colegio concertado de la ciudad.

Tales cifras en el distrito de Nervión no resultan extrañas. Esta zona residencial agrupa a los barrios de moda de la capital Hispalense, como son laBuhaira, San Bernardo y Nervión. Posición que ha adquirido gracias a la perfecta comunicación que ostenta con los diferentes transportes públicos de la ciudad.

Resulta aquí enigmática la casuística del problema de las plazas, pues el foco se sitúa en la escasez de plazas emitidas por parte de la Delegación de Desarrollo Educativo y Formación Profesional para cubrir la alta tasa de escolarización que registran ambos distritos de la ciudad, sobre todo en la zona limítrofe con elSánchez-Pizjuán, lugar donde se encuentra el tridente de colegios más demandado en el distrito Nervión (Portaceli, Buen Pastor y Vedruna), en vez de en la grave deficiencia de solicitudes que subsisten en los colegios del Casco Histórico.

No obstante, aunque presentan una amplia lista de espera, también subrayan los estragos que está ocasionando la baja tendencia de la natalidad en la escolarización. Pues redunda la alarma de las cifras de espera de los colegios más demandados de la ciudad, ya que apenas se acercan a lo que en su día fueron, hecho que ha sentenciado a la casi desaparición de los sorteos de desempate entre los niños que no eran admitidos en un principio. La natalidad no remonta y los colegios ya olvidan las largas listas de espera.