Lipasam ha puesto en marcha desde que acabó la Semana Santa un zafarrancho para retirar los 60.000 metros cuadrados -equivalentes a seis campos y medio de fútbol- de cera de las calles. Se trata de una ardua tarea en la que tres ... equipos con 17 personas estarán en turnos de 24 horas durante tres o cuatro semanas. Más allá del esfuerzo, y teniendo en cuenta que este año que ha sido pleno de cofradías hay más cera y en un mayor número de calles, se entiende insuficiente que apenas se llegue a la veintena de personas las que trabajen.
La retirada de la cera es importante porque, con temperaturas superiores a los 30 grados como está haciendo, se producen resbalones no sólo de peatones sino, sobre todo, de motoristas.
La retirada de la cera se ha organizado de la siguiente forma: durante la Semana Santa, del 1 (Sábado de Pasión) al 9 de abril, con tres equipos en turno de noche. Estas actuaciones diarias están enfocadas a retirar la cera de las zonas con riesgo de accidentes: puentes, cruces de grandes avenidas, calles con paso de vehículos con adoquines o curvas cerradas. Después de la Semana Santa, del 10 de abril hasta la finalización (entre 3 o 4 semanas de servicio), a tres turnos y con los tres equipos para limpiar todas las zonas con acumulación de cera.
Sin embargo, hay un gran número de calles con circulación de vehículos que aún continúan llenas de cera, lo que las convierte en auténticos peligros.
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