Javier Macías: «La serie '1992' de Álex de la Iglesia en Netflix es una oda al topicazo sevillano»

La serie '1992' de Álex de la Iglesia es una oda al topicazo del sevillano. Sólo echa en falta uno a la periodista del Telediario de Antena 3 con el termómetro de Chapina marcando 48 grados para completar el estereotipo.

El director, que se reunió con el alcalde para que la ciudad le promocionara la producción inspirada en la Expo, ha dejado a Sevilla a la altura del betún. Todo el que tiene acento de aquí en la serie, remarcando el 'miarma' y la clásica derrota del Betis, son personajes grotescos: el dueño de un puticlub, empresarios hartos de mariscadas que dieron el pelotazo y cocainómanos, un policía flojo que pasa de la investigación criminal...

Y luego está el propio escenario. Álex de la Iglesia ha rodado en una ciudad que no representa a Sevilla, de la que por cierto no sale casi ningún plano que la deje en buen lugar. El recinto de la Expo, que ciertamente está descuidado pero que es el principal motor económico de Andalucía, aparece en la serie tan abandonado que sólo falta Will Smith con el perro huyendo de los zombies en 'Soy Leyenda'. El uso del canal de la Expo como autopista principal de la Cartuja es constante.

Pero lo que cruza la línea roja hasta la estigmatización es cuando en la serie aparece un supuesto barrio de Los Pajaritos, que no es el de verdad, donde drogadictos enganchados al fentanilo como en la Filadelfia americana te arrinconan.

Afortunadamente, siempre nos quedará 'Noche y Día', donde al menos teníamos Sanfermines corriendo junto a la Giralda.