Un 'gran hermano' en Sevilla: sensores en el Centro y en Triana para saber el comportamiento de turistas y sevillanos

El pliego de condiciones del contrato de implantación, que tendrá como duración cinco meses y un presupuesto de casi 760.000 euros, se aprobó ayer en la junta de gobierno local. El proyecto Phygital se desarrollará en aquellas calles en las que confluyen más visitantes, principalmente en Casco Antiguo y Triana.

En concreto, según se detalla en el pliego técnico, al que ha tenido acceso ABC, este sistema de sensores se implantará en puntos de llegada masiva de visitantes, como son Santa Justa, estación de plaza de Armas y el aeropuerto; así como dentro de la zona de gran afluencia turística de Sevilla, entre ellos los puntos de acceso al Casco Antiguo: calle Adriano esquina con Paseo de Cristóbal Colón y éste con Reyes Católicos, Puerta de la Barqueta esquina Torneo, calle Feria con Resolana, Arco de la Macarena; Puerta Osario y calle San Fernando esquina con el Prado de San Sebastián.

Además, el entorno del Ayuntamiento, Plaza Nueva y plaza de San Francisco; el entorno de la Catedral, Archivo de Indias y Alcázar; plaza de la Alfalfa y plaza del Salvador; las Setas de la Encarnación; Sierpes y la Campana, Alameda y calle Feria; plaza del Altozano y San Jacinto; y el entorno de la Plaza de España.

El Ayuntamiento espera contar con una empresa especializada en la implantación de estos sistemas innovadores para conocer el comportamiento y movimientos de turistas y sevillanos para poder realizar marketing digital directo de proximidad. Entre los propósitos se incluye que comerciantes y el sector del turismo se una a esta iniciativa para remitir contenidos, ofertas, etc. para dotar de contenido el sistema.

Y es que el objetivo, según el pliego, es la mejora del comercio local basado en el análisis de la actividad y comportamiento de los clientes, con objeto de captar y atraer a los visitantes, crear ofertas personalizadas y generar avisos a dispositivos móviles de dichas ofertas, basado en sistemas inteligentes de marketing de proximidad para revitalizar el comercio tradicional y generar riqueza.

Entre los análisis que permitirán los datos de flujos de personas está el tráfico de visitantes y visitas al área comercial, el volumen de visitantes nuevos y recurrentes, los tiempos de permanencia por zonas y extraer patrones de comportamiento.

Sevilla se ha propuesto la implantación de un turismo inteligente como uno de sus retos. Y en esa gestión inteligente de un destino turístico es clave la posibilidad de recoger y explotar la información resultante de la interacción del visitante con la ciudad, tanto en favor de su atención como en favor de la obtención de métricas de inteligencia aplicada al comercio y al turismo. Todos ganan.

Al final, como se explica en el pliego aprobado ayer por el equipo de gobierno de José Luis Sanz, tan importante es conocer el comportamiento físico y digital del visitante como poder comunicarte con ellos en el momento de la visita a la ciudad para interactuar con ellos para orientarles o recomendarles.

El sistema de sensores que se implante debe permitir analizar datos de, al menos, el 70 por ciento de las personas que porten un dispositivo móvil (smartphone o similar) que visitan estos puntos de interés turísticos o comerciales. Además, dicho sistema no debe requerir ninguna acción por parte del visitante para ser detectado como la instalación de una aplicación o conectarse a una red wifi. La recopilación de datos anónimos debe ser transparente al visitante.

Cada punto o zona de interés podría tener, por ejemplo, un área entre 500 y 1.500 metros cuadrados alrededor de un sensor. Las zonas podrán ser exteriores o interiores. El sistema, igualmente, debe captar la señal del dispositivo móvil de las personas para detectar patrones de comportamientos y de repetición de visitas.

El Ayuntamiento quiere que el sistema permita determinar el recorrido de los ciudadanos y turistas por la ciudad, el tiempo de estancia en distintas ubicaciones de interés, etc., día a día, hora a hora, mes a mes, trabajando siempre con datos anónimos y sin contener información personal, «con un estricto cumplimiento de la normativa vigente».

La empresa adjudicataria deberá implantar los elementos necesarios en edificios, recintos y otros emplazamientos, interiores y exteriores, mediante dispositivos para el análisis de los comportamientos, de tipo no intrusivo, sin contacto físico con las personas.

Los datos se mostrarán en una plataforma web, que recoger indicadores de ocupación (análisis de visitas, visitantes únicos y tiempos medios en una zona; visitas y visitantes por hora, día semana, mes y zona; comparativa entre días y zona; flujos entre zonas), de fidelidad (visitantes nuevos y recurrentes), aforo en tiempo real, tiempos medios por zona y mapas con datos, y perfil de clientes basados en comportamientos (turistas, ciudadanos, excursionistas, visitantes de fin de semana o entresemana, visitantes de menos de una semana, quince días o un mes).

«Cualquier solución propuesta deberá tener en cuenta la normativa vigente en cuanto a protección de datos personales, tanto europea como nacional y autonómica». Así lo exige el Ayuntamiento en pliego de condiciones técnicas de este proyecto, con financiación europea.

La recopilación de datos tendrá dos itinerarios. Hacia la administración para conocer los comportamientos de las personas y hacia los propios turistas o ciudadanos, que podrán recibir mensajes por proximidad si se registran anteriormente en los puntos de interés. Se establecerá un plan de suscripción. El objetivo es programar campañas de mensajes, inclusos comerciales para fomentar las compras en el sector.