El Gobierno de Sánchez escoge a dedo a una empresa pública para levantar el puente de la SE-40 en Sevilla

En declaraciones a ABC, ha explicado que, aunque a priori es legal es procedimiento ya que por objeto social INECO es una empresa dedicada a infraestructuras como las carreteras, es «ineficiente» además de poner en serio riesgo el sector privado. «Un encargo no se le puede hacer a una empresa privada sino a un medio propio y esto lo va a hacer una vez más INECO, algo que es gravísimo para España y supone la destrucción del sector de la Ingeniería», ha señalado.

La empresa asignada nació como una oficina técnica para el Ministerio de Obras Públicas y su principal conocimiento ha estado vinculado al ferrocarril y al transporte por carreteras en fases previas, pero no en ejecución. Aunque, según Sánchez de Mora, «una cosa es hacer una planificación y otra es hacer el puente de cierre de la SE-40». Este procedimiento de adjudicación directa a un medio propio por parte de la Administración ha sido habitual para encargar obras en lugares remotos donde nadie quiere licitar «pero no en una obra como ésta que cualquier ingeniería de Europa tiene el máximo interés en realizar», apunta.

¿Y por qué se contrata de esa forma? Desde el sector privado se llega a la conclusión de que sólo se ahorra tiempo debido a la telaraña de la Ley de Contrataciones Públicas. Es decir, el ministro Óscar Puente acelerará de esta forma los plazos para el comienzo de la obra, pero no su finalización y, por supuesto, ni la tarifa ni el resultado final con el que se lleve a cabo. La intención del Gobierno central es hacer parecer que la obra está en marcha como muestra de su compromiso para rematarla, a costa de incrementar de partida su precio de salida en torno a un 30%, «como mínimo», según denuncia Sánchez de Mora: «El encargo del proyecto estará en torno a los 7-9 millones de euros, que movilizarán una obra de 500 millones, pero la trascendencia del proyecto será si estará bien hecho o no, si se mitigan los riesgos en la construcción y en la certeza de lo que costará», expone, comparándolo con el fracaso presupuestario y de retrasos en la obra de la línea 1 del metro de Sevilla.

Y, por otro lado, al 30% de coste superior por el precio de salida que suele conllevar la eliminación de la competencia de mercado de ua licitación, se le sumaría otro 25% extra por la adjudicación, «lo que supone un acumulado del doble para la Administración, para un proyecto que va a ser peor». La tarifa de INECO, según señala este ingeniero, es superior a los precios en los que se suele licitar ya que no hay tensión competitiva.

Por eso determina que encargar una obra a una empresa pública a dedo, «que acabará subcontratándose», ahorra un año de plazo para empezar pero retrasa el de finalización.

Sánchez de Mora ha pedido una reunión con el secretario de Estado de Transportes a fin de obtener una respuesta oficial por parte del Ministerio y lo impugnará, primero por la vía administrativa y, llegado el caso, por la judicial. Su asociación tiene denunciado a INECO ante la Comisión Europea del Mercado de Valores por competencia desleal y porque «no tiene sentido que la mayor empresa de ingeniería civil de España sea pública. Esto no es China», ha declarado a ABC.