La Cumbre de la ONU en Sevilla provoca una discusión de 'cine' entre José Luis Sanz y Antonio Muñoz

«No pasa nada por reconocer el trabajo del Gobierno de España», advirtió Muñoz nada más comenzar su intervención. Y esa 'medalla', más que los detalles de la organización de la Cumbre de la ONU en sí, parecía subyacer en el fondo de la pregunta que había formulado al alcalde en el Pleno de este jueves. Porque la cuestión acabó derivando en un debate cinéfilo en el que el socialista y el propio Sanz hicieron uso de los guiones de las películas más emblemáticas de la historia de la filmografía. Muñoz comparó al alcalde con el actor Paco Martínez Soria y su papel en 'La ciudad no es para mí'. «Ha llegado a la gran ciudad, como él llegó a Madrid, y está incómodo con la cumbre porque viene de la mano del Gobierno de España», arrancó.

Luego prosiguió Muñoz poniendo otra serie de ejemplos que, a su juicio, corroboraban la comparativa que había realizado entre el alcalde de la ciudad y el recordado actor español. «Usted también está incómodo porque la cumbre va en contra de los contenidos que ha firmado con la extrema derecha, porque no ha hecho sus deberes, y porque no sabe cómo aprovecharla», aseguró. Un listado de reproches a los que sumó también las deficiencias en el papel municipal a la hora de completar el dispositivo de seguridad, pues «hay 89 efectivos menos en la Policía Local que cuando empezó su mandato», o las dificultades en materia de movilidad. «Si hubiera apostado de verdad por el tranvibús, ya estaría terminado», dijo.

Este último planteamiento del socialista fue el que llevó precisamente al alcalde a recurrir a otra frase célebre del cine para responder a Muñoz. «Eso que ha dicho me ha recordado a la película 'Forrest Gump'», advirtió. En concreto, «al momento en el que el protagonista señalaba 'Mi mamá dice que los tontos son los que dicen tonterías'», insistió el alcalde. Y al hilo se preguntó: «¿Ha dicho usted que el problema de movilidad lo hubiera solucionado el tranvibús?». Un cuestionamiento retórico al que aportó datos como que «las 90 caravanas que saldrán de los 49 hoteles en busca del Palacio de Congresos o buscando el Alcázar o el Palacio de los Dueñas, no creo que se solucionaran con el tranvibús».

Muñoz reclamó en varias ocasiones al alcalde que le facilitara más datos de la celebración de la Cumbre de la ONU, especialmente en lo referente a las aportaciones que hará el Gobierno de España para su financiación. En esas cuestiones volvía a buscar rédito en la gestión de su partido. Sin embargo, Sanz le recordó que existe «un acuerdo de confidencialidad» que le impedía hacer pública cierta información, aunque reconoció que «esta cumbre la va a venir muy bien a ese agujero de 14,7 millones que dejaron en Contursa», en referencia al trabajo de los socialistas en el anterior mandato. También explicó que se prevé «un impacto económico de unos 20 millones» y que tendrá un coste de «unos dos millones» para la ciudad. Entre ellos, «los 1,53 millones para Policía Local y Bomberos, los 100.000 euros que cuestan la paralización de algunas obras, o los 250.000 euros de Lipasam por la retirada contenedores y papeleras».

Finalmente, Sanz aclaró que «comparte» todos los contenidos que se van a tratar en la Cumbre de la ONU, a pesar de que Muñoz le recriminó que «son los mismos que ha sacado del presupuesto por su acuerdo con Vox». No obstante, el alcalde reconoció que este evento «va a generar problemas» que «no hubieran sido los mismos si en el año 87 el PSOE no hubiera enterrado la red de Metro, o si cuando inauguraron la línea 1 no hubieran enterrado las siguientes, o si hubiera apostado por el cierre del Cercanías. Con todo, cerró su intervención asegurando que le «gustaría» que esta reunión «pasara a la historia porque no haya incidencias reseñables, por conclusiones importantes, y porque el presidente del Gobierno de España no hiciera el ridículo».