El boom de las tiendas de bisutería low cost en Sevilla: no es oro todo lo que reluce
El centro se llena de establecimientos que venden anillos, pendientes y collares a precios económicos. Hay más de 40 en la milla de oro
La 'milla de oro' del comercio de Sevilla se expande a San Eloy y calles anexas
Sevilla
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Iniciar sesiónFue en la antigua Grecia y en Egipto donde las mujeres comenzaron a ponerse piezas brillantes como adornos. Según las crónicas históricas, era frecuente ver a familias con collares, pendientes o anillos. Las mujeres incluso utilizaban diademas y alfileres para cerrar sus ropajes. Seguramente ... esas prendas usadas por las egipcias 1.500 años antes de Cristo son el origen de la bisutería, que ahora parece ir nuevamente al auge.
Será porque el precio del oro está por las nubes y no es asequible a casi ningún bolsillo. O quizás porque es tendencia y en esta época de usar y tirar, cada vez se compran más complementos baratos que luego pueden desecharse sin cargo de conciencia. Pero hay una especie de boom de tiendas de bisutería. Es un fenómeno que se está produciendo en muchas grandes ciudades y del que Sevilla no ha escapado.
Dejando a un lado la de alta costura, ya que todas las marcas de diseño también se han apuntado al fenómeno y rara es la casa de moda que no tiene una línea propia, la bisutería de precio asequible, la low cost, parece estar por todas partes. Y el centro de Sevilla es un ejemplo de ello. Sólo en el eje central del casco histórico, en zonas como la calle Tetuán, Sierpes, Imagen, la Avenida de la Constitución y otras aledañas pueden contabilizarse cerca de cuarenta sólo con darse un paseo por las principales calles.
Precio único
Se trata de tiendas que la mayoría ofrecen productos muy baratos. De hecho podría decirse que son «low cost» de la bisutería. Algunas son tiendas de un precio único en la que todo se vende a 9,99. Por ese precio se puede encontrar lo mismo un anillo, que un colgante, una pulsera o piercing o cualquier otro producto del escaparate. Otras tienen ofertas tipo «pague dos y llévese tres».
Se presentan de forma atractiva ya que brillan mucho en el escaparate y hay veces que es difícil resistirse y no caer en la tentación de comprar.
Aunque casi todas estas tiendas llevan en su cartel anunciador la palabra «jewelry», (joyería en inglés), como diría el viejo refrán no es oro todo lo que reluce. Porque la mayoría de estos establecimientos tiene poco o nada de joyería. No vende el metal preciado sino que se trata sólo de productos de bisutería.
En realidad lo que venden casi todas ellas son complementos que están elaborados en acero inoxidable y que suelen tener un baño de oro amarillo o rosa o plata y que, según insisten los vendedores, «no se ponen negros» con el tiempo. Algunas también ofrecen pendientes o anillos de plata de ley.
Pero, sin duda lo más atractivos para los clientes de este tipo de establecimientos es que suelen tener diseños inspirados en las últimas tendencias y a precios muy asequibles.
Hay algunas que son cadenas y tienen varias por toda la ciudad: es el caso Miramira o I am joy que tienen varias en distintos puntos estratégicos. A ellas se han sumado otras con un concepto parecido: ofrecer colgantes, pulseras y todo tipo de adornos a precios muy asequibles con diseños de última moda.
«El auge del complemento se debe a que es lo que más se lleva. Es mucho más económico que el oro y la plata si se te pierde no te duele tanto», explica una de las dependientas de I am joy de Sevilla.
¿Qué tipo de clientela tienen? Según explican desde otro de estos comercios, venden mucho a los turistas por una zona transitada por miles de visitantes. Por eso algunas no sólo ofrecen bisutería sino que añaden otros artículos como imanes, abanicos, gafas de sol y en general souvenirs para los «guiris».
Sin embargo no sólo de extranjeros viven estas tiendas. También entran (y compran) muchos vecinos de la ciudad que tampoco se resisten a las atractivas ofertas.
Es un fenómeno que en casco histórico de Sevilla convive con otras tiendas clásicas e históricas como son Elena Bernal o Blasfor que siguen resistiendo y vendiendo sus complementos desde hace décadas con una clientela fiel. Y también con otros comercios de grandes cadenas de moda que han incluido este tipo de complementos en sus ventas. Desde Parfois a Zara, Mango, Sfera, Stradivarius... todas las grandes marcas venden también bisutería a precios asequibles.
En cualquier caso la proliferación de estos comercios no es algo que esté afectando a la alta joyería y las tiendas que venden grandes marcas de relojes. «No es competencia para nosotros. Tenemos clientes de otro nivel», admiten desde una de las y joyerías más emblemáticas de Sevilla. Parece que hay sitio para todos.
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