La institución que organiza este evento, consultada por este periódico, ha vuelto a hacer hincapié en que, desde su nacimiento en 1918, nunca se ha suspendido por motivos meteorológicos: «La Cabalgata va a salir. Es posible que haya padres que no lleven a sus niños, pero tendría que venir una catástrofe para que no saliera».
Sí que contempla el Ateneo la posibilidad de realizar ajustes en cuanto al horario y recorrido del discurrir de la comitiva por las calles de la capital hispalense, aunque ninguna adoptada oficialmente como plan B, de tal forma que, de momento, se mantienen el recorrido y el horario previstos. En ese aspecto, los responsables se reúnen mañana viernes para poner sobre la mesa las diferentes opciones y elegir la que consideren más conveniente.
«La dirección de Cabalgata junto a la directiva del Ateneo, atendiendo a las previsiones climatológicas tomará las decisiones necesarias para minimizar al máximo posible el riesgo para los participantes y la propia Fiesta Mayor», ha señalado el Ateneo en un comunicado.
Cabe destacar que la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) prevé un cien por cien de posibilidad de lluvias para la tarde del 5 de enero, siendo además probables las tormentas por la tarde noche, cuando las carrozas de Melchor, Gaspar y Baltasar deberían estar recorriendo las calles del Centro, Triana y Los Remedios.
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