Adoquines de Gerena para el parque de María Luisa de Sevilla

El Consistorio colocará adoquines grises y de Gerena, tras el movimiento que reclama la recuperación de la imagen del viario de la urbe con el colorido de estos elementos que han formado parte de las calles sevillanas durante décadas. Por ello, se han realizado «gestiones para su localización en almacenes de construcción, habiéndose encontrado alguna existencia disponible, pero muy limitada», según el informe al que ha tenido acceso ABC de Sevilla. Estos adoquines «recuperados de otras obras, necesitarán un tratamiento de limpieza y saneado en la mayoría de las piezas».

Además, los trabajos «se diseñan con adoquín gris en su mayor parte, incluyendo adoquín de Gerena en las canaletas de recogida de agua por ser de mayor tamaño favoreciendo la eficacia de las mismas, así como en la parte central de la avenida de Rodríguez de Caso, por ser la más ancha». También, se incluye estos elementos en los accesos a los paseos alberados entre parterres de todas las vías incluidas en el proyecto y reflejadas en los planos, actuando como lugares de transición entre las piezas gris y el albero. Se propone la pavimentación de albero en los paseos laterales de las avenidas, los cuales se encuentran en la actualidad en mal estado.

En la avenida Conde Colombí, se trabajará para realizar una red de alcantarillado para proyectar la ejecución de una línea que se conectaría con la el resto de tramos existentes en el parque. Todo ello, evitaría la introducción de raíces en los tubos y pozos, así como la entrada de tierras y hojarasca por los sumideros. También, se adecuará la recogida de aguas pluviales existente en la actualidad en las avenidas de Pizarro y Hernán Cortés que, según el proyecto, «no está construida de manera homogénea y presenta muchos problemas de encharcamiento».

Asimismo, se plantea la construcción de una canaleta lateral a los dos lados de ambas vías, ligeramente deprimida respecto del pavimento asfaltado de las mismas, para recogida de las aguas, construida con adoquín de Gerena, adecuando el nivel que se puede ver en la actualidad. La superficie estimada para pavimentar supone un total de 8.071 metros cuadrados de unos lugares que son de asfalto. Si se pasea por la avenida Rodríguez de Caso, se observa que el asfaltado «se encuentra muy deteriorado, resultando un peligro para la seguridad de la circulación tanto peatonal como rodado».

Estas vías están plagadas de socavones, con una superficie desplazada por el desgaste, por los desniveles y hundimientos que, en varios puntos provocan unos charcos enormes que también generan no sólo peligro para ese tránsito sino una imagen decadente muy poco acorde con el marco histórico que supone este parque.

Estos trabajos se van a incluir en una tercera fase de un plan global de arreglos en el centenario espacio. En la primera, se repavimentaron todos los caminos de albero del parque, con un presupuesto conjunto de 357.000 euros. Fueron 77.800 metros cuadrados de caminos de albero y la pavimentación consistió en escarificado, relleno de albero, extendido, regado y compactado de la superficie final. En la segunda, con casi 320.000 euros de presupuesto y ejecutada en 2019, se actuaron sobre 9.100 metros cuadrados de caminos asfaltados. De ellos, fue pavimentado con adoquín de granito una superficie de 1.760 metros cuadrados y de pavimento de asfalto 7.330 metros cuadrados. Con granito, se reurbanizaron la avenida de Bécquer y la glorieta Gabriela Ortega.

La tercera fase atañe a una superficie de 13.300 metros cuadrados y, con esa pavimentación la totalidad de las vías asfaltadas del Parque de María Luisa quedaban «en buen estado» a excepción de toda esta zona más cercana a la avenida de Bécquer, donde el deterioro del propio asfalto obliga ahora definitivamente a añadir un apartado especial de nueva pavimentación, que se va a acometer desde ahora y hasta el próximo mes de mayo.

Con respecto a otras actuaciones sobre el recinto, hay que señalar que el Ayuntamiento ha comenzado a instalar cámaras de videovigilancia, así como de una dotación de dos equipos de vigilancia integrado cada uno de ellos por un vigilante con vehículo, que recorrerá este parque desde las ocho de la tarde hasta medianoche, todos los días del año. Todas estas iniciativas y proyectos servirán para proteger y embellecer uno de los atractivos turísticos de la ciudad, donde vecinos y viajeros pasean entre sus árboles y glorietas.