El inicio de curso universitario en Sevilla: «Habrá que acostumbrarse a madrugar y dejar de salir de fiesta»
Primer día de clase en la Hispalense, con opiniones diversas sobre el adelanto lectivo que coincide con Primaria
El rector de la Universidad de Sevilla se queja de que año tras año sus reivindicaciones no son atendidas
Sevilla
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Iniciar sesiónÁlvaro Barba empieza este lunes el primer curso de Relaciones Laborales y Recursos Humanos. Es uno de los 54.000 estudiantes de grado y Master que comienzan las clases en la Universidad de Sevilla. En este caso es de los novatos, unos 12. ... 000 que llegan a la universidad.
Por eso aunque Álvaro tiene ganas de empezar está un poco nervioso. «Supone un gran cambio con respecto al Bachillerato porque aquí nos tenemos que conocer todos», dice este joven que confiesa haber elegido a conciencia la carrera que va a comenzar. Tiene ganas de estudiar y de conocer la vida universitaria.
Laura Moreno es otra joven que empieza primero del doble grado de Derecho y ADE. Llega con ganas y un poco nerviosa. «Habrá que acostumbrarse a madrugar y a dejar la vida nocturna», comenta esta joven de un pueblo de Badajoz que ha llegado a Sevilla y que confiesa que habrá que acostumbrarse a estudiar de nuevo. Reconoce que tiene más ganas de salir de fiesta.
Cuando se le pregunta a los más veteranos, se les nota la experiencia y la mayoría opinan sobre el cambio que ha experimentado este año cuando por primera vez no ha habido exámenes de septiembre que se adelantaron a julio y han obligado también a anticipar el inicio del curso. Un cambio con el que algunos están de acuerdo y otros no tanto. «Tienes el verano libre apruebes o no», dice una joven estudiante de Derecho.
Sin embargo, a otros no les gusta, porque considera que se solapan los exámenes de final de curso con la convocatoria extraordinaria que se hace en julio.
Verano
Por ejemplo, Ángela Vidal, que estudia el doble grado de Derecho y ADE en la Universidad de Sevilla, y que este año empieza cuarto afirma que la experiencia no ha sido muy buena porque al final se solapan unos exámenes con otros. «Cuando eran en septiembre no tenías tanto verano, pero al final podías aprovechar para estudiar», explica.
«Estamos empezando igual que el colegio», apunta otro de los miles estudiantes que hoy vuelven a las aulas. El primer día en la mayoría de facultades y centros sólo hay una presentación. Luego tendrán que empezar a estudiar. Es lo que toca.
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