El asesino del vicario de San Isidoro confesó el crimen a su exmujer

La sobrina del sacerdote Carlos Martínez ha explicado a la instructora que sobre las ocho de la tarde del 16 de julio recibió un mensaje en su teléfono móvil en el que su expareja le confesaba que acababa de matar a su tío. La muerte del sacerdote se produjo minutos antes en el portal de su vivienda, ubicada en la calle Francisco Carrión Mejías.

José Eugenio A. F. , de 51 años, esperó a que el vicario entrara en el bloque y antes de que pudiera coger el ascensor se abalanzó sobre él y le asestó varias puñaladas . Por el relato que ha expuesto su exmujer, instantes después le envió un mensaje para decirle lo que acababa de hacer.

El único imputado por el crimen fue apresado en Triana antes de que llegara a la vivienda de su expareja. Al parecer, según las pesquisas policiales, tenía intención de acabar con su vida . El trasfondo de esta trágica historia es la ruptura de la pareja, de la que José Eugenio A. F. culpaba al sacerdote.

Además de la sobrina del vicario, la jueza ha oído en declaración al empleado de un taller mecánico que hay próximo a la vivienda de la víctima que oyó con claridad los gritos de auxilio del sacerdote.

Según ha confirmado la oficina de comunicación del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), la jueza está pendiente de recibir un informe de la Policía Científica sobre el análisis de los restos de sangre aparecidos en la camisa del detenido y en el arma encontrada, así como los resultados del informe forense psiquiátrico practicado al imputado. 

Como ya se conoce, José Eugenio A. F. cometió presuntamente el crimen tras escapar de un centro hospitalario después de un intento de suicidio. En estos momentos se encuentra en prisión, imputado por un delito de asesinato.