La acampada de La Corrala puede afectar a la Semana Santa

Tras intentar irrumpir en la Catedral, los organizadores aseguran que no se moverán de la Plaza Nueva hasta que no les den un piso. Por donde están instalados pasan varias cofradías

La acampada de La Corrala puede afectar a la Semana Santa raúl doblado

a.g.r.

08/04/2014
Actualizado a las 11:55h.

Durante todo el domingo en el que se produjo el desalojo los organizadores de La Corrala y destacados cargos de IU se quejaron en las redes sociales de que el alcalde, Juan Ignacio Zoido , estaba participando en un acto cristiano — ... el pregón de Semana Santa — mientras la Policía llevaba a cabo su intervención en el edificio de San Lázaro . En esa actitud se mantuvo ayer también una de las pocas okupas que quedaban en la Plaza Nueva, que acusó a Zoido de «gastarse el dinero en bandas y santos» mientras ellos tenían que estar en la calle. De hecho, antes de situarse frente al Ayuntamiento los miembros de esta organización intentaron instalarse en el interior de la Catedral , algo que impidió la Policía, así que acabaron colocando sus mochilas y enseres en plena Plaza Nueva . Y una vez allí, se lanzó un aviso: no se moverán «hasta tener un techo». «Del mismo modo que nos hemos llevado dos años sin agua ni luz, nos podemos llevar otros dos años en la Plaza Nueva tirados », dijo una de las participantes.

Esta postura puede afectar claramente al desarrollo de la Semana Santa , ya que el próximo domingo tendrá que pasar justo por el lugar en el que se han instalado los okupas la hermandad de La Paz y detrás de ésta lo tendrán que hacer otras muchas.

«Estamos todas las familias en la calle y aquí estaremos lo que haga falta porque no hay derecho que haya personas enfermas y mayores luchando por un techo porque lo hemos perdido todo», reiteró Aguas Santas , una de las pocas okupas que resisten ya en la organización. Además, explicó que se han ido al Ayuntamiento y no a la Consejería de Vivienda de la Junta porque Emvisesa «tiene 384 viviendas vacías», un dato que parecía controlar bastante bien. Otra okupa, Esther, reclamó «un alquiler social» porque dice que «nunca» se ha negado a pagar una vivienda . «Esto es un sufrimiento, lo que quiero es un alquiler social y un techo donde meterme», protestó. La directora general de Vivienda de la Junta, Amanda Meyer , rechazó la propuesta de Ibercaja de realojar a estos vecinos con alquileres sociales que, además, comenzarían a pagar dentro de seies meses, como confirmó ayer la delegada de Asuntos Sociales del Ayuntamiento, Dolores de Pablo-Blanco .

La Junta incluso anunció ayer que había liberado seis pisos para estos afectados y exigió al Ayuntamiento que «cumpla la legalidad» y ponga a disposición de los okupas otros 16, ya que la sentencia dice que las administraciones tienen que velar por las familias. Pero otra vez se habla de 22 viviendas pese a que la Policía ha certificado que había 12 ocupadas en San Lázaro. ¿Para quién son las diez restantes?