«¡Menos mal que no tomé antibióticos porque tenía una bajada de calcio!»

Agueda Alonso Sánchez asegura que hasta que no se está enfermo no se sabe cómo funciona la sanidad en Andalucía

Pide a los pacientes con quejas que no duden en poner una hoja de reclamaciones y a los médicos que «están presionados y tiene órdenes de reducir gasto que hablen claro» aunque entiende que «si no lo hacen es porque tienen miedo a perder sus puestos de trabajo». «No podemos seguir consintiendo atrocidades», sentencia.

Afirma que en Sevilla los problemas que sufren los enfermos no son pocos y pone ejemplos.

«Si tienes que hacerte una colonoscopia, esperas 4 meses para que te envíen la cita, aunque tengas antecedentes familiares de cáncer de colon y estés presentando problemas evidentes de alarma. No hay personal suficiente para atender la demanda, por ello quedan personas sin atender diariamente, poniendo en peligro sus vidas. ¿quién responderá de las consecuencias de estos retrasos?», pregunta.

También critica que si vamos a urgencias, es penosa la atención » y «a partir de las 8 de la tarde no hay muchos de los especialistas precisos, solo están localizados a 20 kilómetros, pero si hay tres personas que tienen un ictus al mismo tiempo ¿qué pasa?».

Otras de las quejas que ha recibido se refieren a las analíticas, las cuales tienen fallos con frecuencia, «lo que puede llevar a una mala medicación». No pasa por alto cómo «se retrasan los diagnósticos y se alargan las listas de espera y añade que «también se da el caso de que operen a una persona de estómago o tiroides y, al día siguiente o incluso el mismo día esté en su casa».

Asegura que conoce un caso de un operado de tiroides que recibió el alta en 24 horas y a las pocas horas terminó en urgencias, porque se le durmió el cuerpo.

«En urgencias —continua— le prescribieron antibióticos, no se los tomó y, cuando pudo ver a su doctora le dijo que, menos mal que no se los había tomado. Era una bajada de calcio propia en este tipo de intervenciones, solo que el profesional médico que le atendió en urgencias no sabía de qué iba y lo quiso solucionar con antibióticos, que hubieran podido ser bastante negativos en este caso, si llega a ingerirlos».

En su opinión, la subasta de medicamentos perjudica a los andaluces «digan lo que digan los que nos gobiernan» y aconseja que si « hace falta ahorrar, que recorten de otro lado, la salud no es un juego y ahora está en juego». «Y los que sufrimos tenemos que oír diariamente lo bien que gestionan y los ahorros que están haciendo en salud y no les da vergüenza de provocar que la gente esté tan mal atendida», relata Alonso que sólo ha aportado «un botón de muestra».

Tras el parántesis del verano, el lunes, los sindicatos profesionales SMA, Satse, Fate y SAE —médicos, enfermeros, auxiliares y técnicos superiores— volñverán a protestar por el deterioro de la asistencia y su situación laboral debido a los recortes sanitarios.

Partirán en manifestación hacia la sede del SAS desde la Puerta de Jerez a las cuatro de la tarde, esta vez sin UGT, CC.OO, Csi-f y CGT que formaban conjuntamente con ellos la plataforma contra la fusión hospitalaria que se creó el pasado año ante la unificación de las direcciones del Virgen del Rocío y el VirgenMacarena en una sola gerencia.

«Por la seguridad del paciente. Stop recortes » es el lema que explicita la principal reivindicación de los convocantes los cuales ven en la disminución de las prestaciones el principio del fin, o del desmantelamiento de la sanidad pública andaluza que ahora, vaticinan, sufrirá más deterioro dada la merma de las partidas para sanidad que se contempla en los Presupuestos de la Junta de Andalucía de 2014.

Pero las protestas no llegan solo de la asistencia hospitalaria y de Atención Primaria por parte de profesionales que demandan más medios humanos y materiales. Ahora también se suman los de los servicios de emergencia del 061, uno de los más valorados por los usuarios año tras año —el grado de satisfacción roza el 95%— por la atención que presta y la infraestructura con la que cuenta, que según Ángel Lucena , del Sindicato Médico de Sevilla, «están en la ratio que aconseja la Unión Europea».

También ven peligrar la calidad de la atención por 2.275.948 euros que recortarán en 2014 solo en concepto de personal pero no saben qué trascendencia tendrá en el servicio.