El primer caso en animales en España fue en el año 2000
ABCMADRID. El 22 de noviembre de 2000 se conoció el contagio de Parrula, la primera vaca afectada en nuestro país por la Encefalopatía Espongiforme Bovina. Desde ese año y hasta 2007 se han detectado
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MADRID. El 22 de noviembre de 2000 se conoció el contagio de Parrula, la primera vaca afectada en nuestro país por la Encefalopatía Espongiforme Bovina. Desde ese año y hasta 2007 se han detectado en nuestro país un total de 720 casos de animales ... afectados por Encefalopatía Espongiforme Bovina (EEB), siendo el segundo país tras el Reino Unido con mayor número de casos de la enfermedad. En 2007 se registraron 39 casos, todos ellos en el noroeste de España, además de Navarra y Gerona.
Pero al contrario que otros países europeos España estuvo libre de esta variante humana del llamado «mal de las vacas locas» hasta 2005, cuando una joven madrileña de 26 años de edad se convirtió en la primera víctima en España del tipo «variante» de la enfermedad de Creutzfeldt-Jakob. Nunca se confirmó si la transmisión ocurrió por consumo de carne o accidentalmente, cuando la joven trabajó como técnica en un laboratorio universitario de sanidad animal de Madrid, puesto que había abandonado hace años. La joven falleció el 10 de julio de 2005, ocho meses después de descubrirse los primeros síntomas de la patología, en un proceso extremadamente rápido.
Tres casos en España
Con las muertes conocidas ayer ya son tres las registradas en nuestro país. Los médicos siempre habían advertido de que era posible que en España aparecieran nuevos casos hasta 2010, toda vez que los controles intensivos de los animales se instauraron en el año 2000 y que el periodo de incubación de la variante de la enfermedad de Creutzfeldt-Jakob se estima que es de entre cinco y diez años.
Pero en los últimos años ha habido más sospechas de casos, que finalmente fueron descartados. Así, en abril de 2006 un joven fallecía en la Fundación Hospital Alcorcón. Aunque los padres del joven sostenían que era víctima de la variante humana porque vivió más de un año en Inglaterra a finales de los 90 -cuando la carne infectada aún no había sido eliminada de la cadena alimentaria-, la autopsia reveló que su muerte se debió a la forma más común de la enfermedad y no la variante humana. Además, en febrero de 1997, un joven británico falleció en Málaga víctima de esta enfermedad, que desarrolló en Gran Bretaña.
Y es que el Reino Unido es el país más afectado. En total, once países de Europa, América del Norte y Asia han registrado muertes por la variante de la Enfermedad de Creutzfeld-Jakob desde que se registrara el primer caso en el Reino Unido a mediados de los años 90. Precisamente, es este país el que más casos de la enfermedad ha registrado, un 80 por ciento (166) del total. Le sigue Francia (23 casos), Irlanda (4), Estados Unidos (3), Holanda (2), Portugal (2), España (3), Italia, Canadá, Arabia Saudí y Japón (un caso en cada uno).
Red de vigilancia
En nuestro país, el Centro Nacional de Epidemiología es el que se encarga de la coordinación de la red de vigilancia, del mantenimiento del registro y del intercambio de información con la Unión Europea sobre la Enfermedad de Creutzfeldt-Jakob y el resto de las Encefalopatías Espongiformes Transmisibles.
Debido a que estas enfermedades son muy poco frecuentes, en cada autonomía se ha designado un coordinador clínico, que suele ser un neurólogo con experiencia en el diagnóstico y manejo de esta enfermedad, para el apoyo diagnóstico de los casos sospechosos. Siguiendo la pauta de la vigilancia de las enfermedades transmisibles, en cada región el servicio de epidemiología cuenta con un responsable para coordinar la vigilancia de la enfermedad, que son los encargados de declarar los casos al Registro Nacional de la enfermedad, localizado en el Centro Nacional de Epidemiología.
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