Explican por qué las personas padecen hemorroides
Las hemorroides, también llamadas almorranas, afectan a una gran parte de la población
Un estudio internacional que han analizado el ADN de casi 1 millón de personas ha identificado algunas de las causas probables de las hemorroides, un problema que afecta a una gran parte de la población.
Las también llamadas almorranas se desarrollan al final del tracto digestivo y, cuando se hinchan causan dolor, picazón y, a veces, sangrado , lo que limita las actividades diarias. Si bien la mayoría de las personas que padecen hemorroides descubren que los síntomas se pueden resolver con tratamientos sencillos, las formas más graves requieren tratamiento quirúrgico.
Aunque se han propuesto muchos factores que hacen que las personas corran el riesgo de desarrollar hemorroides, incluido un estilo de vida sedentario, la obesidad, a la ingesta reducida de fibra dietética , etc., hasta ahora no se había pensado si las personas podrían estar genéticamente predispuestas .
«Nuestra investigación analiza por primera vez la composición genética de casi 1 millón de personas y proporciona información importante para comprender la enfermedad», señala Tenghao Zheng , autor principal del estudio que se publica en «Gut» e investigador de la Escuela de la Universidad de Monash (Australia).
Los investigadores estudiaron millones de cambios en el ADN del genoma de 218.920 pacientes y 725.213 personas sanas de ascendencia europea de biobancos y cohortes poblacionales.
Es el resultado de una disfunción del tejido conjuntivo, epitelial y del músculo liso
Así, identificaron 102 regiones genómicas nuevas que presentan riesgo de enfermedad hemorroidal y descubrieron que estos genes se expresan principalmente en los vasos sanguíneos y los tejidos gastrointestinales, y colectivamente participan en el control de la función del músculo liso y el desarrollo y la integridad de las estructuras epiteliales y endoteliales en el intestino.
«Nuestro estudio nos llevó a concluir que la enfermedad hemorroidal es el resultado de una disfunción del tejido conjuntivo, epitelial y del músculo liso».
Además, los resultados apuntan a la participación de algunos procesos y vías biológicos en la enfermedad hemorroidal, y «esto puede ayudar a encontrar opciones de tratamiento alternativas dirigidas a esas vías», afirma Mauro D'Amato , del CIC bioGUNE en Bilbao.
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