Confirmado: la carne procesada aumenta el riesgo de muerte y enfermedades cardiovasculares

Un estudio publicado en «The American Journal of Clinical Nutrition» sugiere que el consumo de cantidades moderadas de carne sin procesar no es nocivo, pero se deben evitar las carnes procesadas

Carne procesada en Alemania EFE

R. Ibarra

Las carnes procesadas son las más perjudiciales para el organismo. Lo ha verificado el estudio PURE , el primer estudio multinacional que explora la asociación entre la ingesta de carne procesada y sin procesar en países de ingresos bajos, medios y altos.

Publicado en «The American Journal of Clinical Nutrition» ... el trabajo no encontró que el consumo de carnes rojas y aves de corral sin procesar esté asociado con la mortalidad ni con enfermedades cardiovasculares.

Sin embargo, una mayor ingesta de carne procesada se asocia con un mayor probabilidad de mortalidad por cualquier causa o por enfermedad cardiovascular.

Las carnes rojas son una fuente importante de ácidos grasos saturados de cadena media y larga, que pueden aumentar el riesgo de enfermedad cardiovascular. Pero las carnes procesadas, que han sido modificadas para mejorar el sabor o extender su vida útil, también se han asociado con un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular.

Ello ha hecho que las guías dietéticas recomienden limitar el consumo de carne roja y procesada.

Sin embargo, este nuevo trabajo rectifica un importante ‘vacío’ en la investigación y ayuda para comprender mejor el impacto del consumo de carne y productos cárnicos sobre la salud.

«Las evidencias de que hay una asociación entre la ingesta de carne y las enfermedades cardiovasculares era inconsistente», señala Romaina Iqbal , primera autora del estudio.

Por lo tanto, «queríamos comprender mejor la relación entre la ingesta de carne roja sin procesar, la de aves y la de carnes procesadas con la enfermedad cardiovascular y la mortalidad».

El estudio PURE , que se inició 2003, ha monitorizado los hábitos alimentarios y los resultados de salud de más de 164.000 participantes de 21 países de ingresos bajos, medios y altos en los cinco continentes.

Pero las carnes procesadas, que han sido modificadas para mejorar el sabor o extender su vida útil, también se han asociado con un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular.

Mahshid Dehghan , de la Universidad McMaster y Ciencias de la Salud de Hamilton (Canadá) señala que «el estudio PURE es el primer ensayo multinacional que proporciona información sobre la asociación entre la ingesta de carne procesada y no procesada sobre la salud en países de ingresos bajos y medianos. Además, examina poblaciones más diversas y patrones de dieta más variados, lo que nos permite proporcionar nueva evidencia».

Y los resultados arroja nuevas evidencias acerca del consumo de carnes y su relación con la enfermedad cardiaca. «No encontramos asociaciones significativas entre la ingesta de carne roja sin procesar y la de aves de corral con una mayor mortalidad o riesgo de enfermedades cardiovasculares», escriben.

Por contra, la ingesta de carne procesada sí se asoció con un mayor riesgo de mortalidad y enfermedad cardiovascular.

Los autores creen que es preciso más para mejorar nuestra comprensión sobre la relación entre el consumo de carne y los resultados de salud.

Pero lo que es claro es que los hallazgos «indican que se debe alentar una menor consumo de carne procesada».

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