El truco del limón y la pasta de dientes para la lavadora: es muy fácil y efectivo

No cabe duda de que la lavadora es uno de los electrodomésticos más utilizados en los hogares, pero también puede que sea uno de los que menos se cuidan respecto a la limpieza del mismo y su buena conservación. Al ser un aparato que limpia, se puede dar por hecho que no se ensucie, pero esto queda muy lejos de la realidad.

Los restos de suciedad, pelos, pelusas, partículas de papel u otros materiales que puede haber en la ropa, junto con los residuos que pueden generar los detergentes y suavizantes, pueden hacer que, con el paso del tiempo, se vaya formando una capa de suciedad poco visible pero existente, sobre todo en la parte de la goma que está en la puerta.

Tanto la parte visible como la interna de este componente de la lavadora tiende a acumular suciedad, la cual pocas veces nos paramos a revisar. Cuando pasa un tiempo, con esta capa de porquería, además, pueden desprenderse olores desagradables. Por otro lado, el mismo tambor y el mecanismo del electrodoméstico también pueden limpiarse para cuidar el aparato y que nos dure más. Algo que contribuirá al buen lavado de nuestras prendas y a evitar el riesgo de que cojan malos olores.

Pero ¿cómo limpiar la lavadora? Esto es más fácil de lo que crees gracias a este truco que se ha popularizado en redes sociales y para el que necesitarás solo dos elementos que todos solemos tener por casa. Este truco, además de limpiar, también devolverá el brillo al tambor y refrescará el olor del electrodoméstico.

El limón y la pasta de dientes son los ingredientes estrella para dejar tu lavadora impecable. Aunque parezca sorprendente, la combinación de ambos componentes resulta muy higiénica y tiene varios beneficios como la facilidad del limón de deshacer la suciedad gracias a su acidez, así como la capacidad de limpieza de la pasta de dientes y de aportar brillo. Además, ambos elementos cuentan con aromas refrescantes capaces de eleiminar los malos olores que pueda haber en tu lavadora.

Aunque hay varios modos de hacerlo, te explicamos la mejor técnica para sacar todo el partido a este truco. Parte dos o tres limones por la mitad y échales pasta de dientes por encima, mételos en la lavadora limpia y sin nada más en su interior. Por otro lado, puedes untar un poco de pasta de dientes por dentro del cristal de la puerta de la lavadora.

Otro paso que puedes incorporar es exprimir un poco de zumo de limón, mezclarlo con pasta de dientes y mojar un trapo en la mezcla. Después, puedes pasar ese trapo entre los recovecos de la goma de la lavadora para retirar la suciedad acumulada si hiciese falta. En este otro vídeo de Instagram puedes ver un modo similar de hacerlo.

Después de estos dos pasos, cierra la lavadora y pon un programa corto con agua fría para que los limones con pasta de dientes que hay en su interior hagan su función y al final quede todo enjuagado. Al terminar, verás que tu lavadora está más brillante y limpia que nunca, además de con un olor fresco y suave. Por si esto no fuera poco, al limpiar la lavadora de este modo también ayudamos a alargar su vida útil y a que su funcionamiento no se deteriore.