Un repartidor de Amazon estropea un paquete al negarse a entregarlo en mano

Así, algunas personas llegan a recibir numerosos paquetes en una semana, dado que prefieren que les lleguen las compras a casa o bien porque no tienen cerca la tienda del producto que necesitan o desean.

En este sentido, aunque cada empresa se encarga de la calidad de su producto, los repartidores son, finalmente, quienes hacen llegar en buenas condiciones los productos a los destinatarios. Aunque a veces los paquetes reciben daños por cuestiones que no dependen del repartidor, en otras ocasiones, un mal gesto o decisión desacertada también pueden perjudicar al contenido de las cajas y sobres que llevan.

Así ha sucedido con un usuario de la red social 'X', antes llamada Twitter, que ha contado su experiencia a través de este canal. Jorge Narajo, @nanafilms, como se hace llamar en la aplicación, ha compartido una publicación en la que recrea la conversación que tuvo con un repartidor de Amazon, acompañada de imágenes de cómo recibió su paquete:

Como se puede leer, al parecer el cliente de Amazon estaba en casa cuando recibió la llamada del repartidor, quien le indicó que le dejaba el paquete en el buzón porque cabía. Jorge, por su parte, le dijo que prefería que se lo diera en mano, que si quería bajaba y se encontraban a medio camino, pero el repartidor no le dio opción y le dijo que el paquete ya estaba en el buzón.

Al recogerlo, el usuario de Twitter ha querido mostrar cómo quedó: el sobre de cartón dobaldo y magullado y, por tanto, el contenido del mismo, que era un libro, también se había estropeado considerablemente. Como prueban las repuestas a la publicación, Jorge ahora tiene que esperar a que le manden un otro libro para que le llegue en buenas condiciones.

Aunque la mayoría de respuestas hacen referencia a que también han tenido malas experiencias con los repartidores de Amazon o de otras compañías, también hay quien intenta excusar al repartidor. De hecho, hay quien culpa a la empresa al indicar que los repartidores tienen demasiada carga de trabajo, lo que les lleva a ir muy rápido y llevar a cabo este tipo de acciones que, al final, terminan perjudicando a ambas partes.