Esto es lo que hacen los Navy Seals para quedarse dormidos en un minuto: «Incluso en situaciones de estrés»

La técnica se basa en un patrón específico de respiración: inhalar durante cuatro segundos, mantener la respiración durante siete segundos y exhalar lentamente durante ocho segundos. Este proceso ralentiza el ritmo cardíaco, promueve la producción de melatonina —la hormona del sueño— y genera un estado de relajación profunda. Repetir el ciclo varias veces ayuda a calmar la mente y el cuerpo, creando las condiciones ideales para conciliar el sueño rápidamente.

Aunque se ha hecho popular recientemente, la técnica 4-7-8 tiene sus raíces en el pranayama, una práctica yóguica antigua que se centra en la regulación de la respiración para mejorar la salud física y mental. En 2015, el doctor Andrew Weil, especialista en medicina integrativa, la popularizó al presentarla como una forma efectiva de reducir la ansiedad y mejorar la calidad del sueño. Desde entonces, numerosos estudios y expertos han avalado su efectividad.

Según la doctora Rebecca Robbins, profesora de medicina en Harvard, la técnica no solo ayuda a dormir, sino que también es una herramienta útil para calmar la mente antes de ir a la cama. «Muchas personas tienen dificultades para dormir porque su mente está en constante movimiento», explicó Robbins.

Aunque no se necesita ningún equipo especial para practicar el 4-7-8, se recomienda que, al aprender la técnica, las personas se sienten con la espalda recta en un entorno tranquilo. Con el tiempo y la práctica, se puede realizar el ejercicio incluso estando acostado en la cama. Es fundamental mantener la proporción de los tiempos de respiración, ya que eso es lo que garantiza la efectividad del método. Si resulta difícil al principio, se puede acelerar el ritmo de la respiración manteniendo siempre la proporción 4-7-8.

Este sencillo pero poderoso ejercicio se ha convertido en una herramienta indispensable para quienes buscan combatir el insomnio y la ansiedad de manera natural. Al igual que los Navy Seals, cualquier persona puede beneficiarse de la técnica 4-7-8 para lograr un descanso profundo y reparador, incluso en los momentos más estresantes.

Además de su efectividad para conciliar el sueño, la técnica 4-7-8 también ha demostrado ser útil en la gestión de momentos de estrés agudo o ataques de ansiedad. Al regular la respiración de forma consciente, se activa el sistema nervioso parasimpático, responsable de la calma y la relajación en el cuerpo. Esto no solo ralentiza el ritmo cardíaco, sino que también disminuye los niveles de cortisol, la hormona del estrés, lo que contribuye a recuperar el control emocional en situaciones difíciles.

Curiosamente, esta técnica ha ganado popularidad en parte por su accesibilidad y simplicidad. No requiere ningún equipo especial ni un entorno específico, lo que la hace fácil de incorporar a la rutina diaria. Ya sea antes de una presentación importante, en medio de una jornada laboral estresante o antes de dormir, el método 4-7-8 ofrece una solución rápida y natural para reducir el estrés y mejorar el bienestar general.