Una mujer australiana revela cómo gana casi 7.000 euros al año por alquilar un lado de su cama a extraños

Si bien algunas personas pueden horrorizarse ante la idea de estar en la cama junto a un extraño, la australiana reveló que en realidad está bien si no piensas demasiado en ello. Además confesó que con esta práctica ha logrado ganar alrededor de 500 libras al mes, unos 583 euros, por el simple hecho de dormir junto a otra persona. «El 'Hot bedding' es excelente para las personas que son capaces de desconectarse emocionalmente y dormir al lado de otra persona de forma totalmente respetuosa y sin ataduras. Es la situación perfecta, especialmente si eres sapiosexual, como yo, y prefieres el compañerismo al físico», reveló Monique a 'Caters News'.

Sin embargo, la australiana confesó que no todo el mundo está preparado para realizar esta práctica, ya que «se necesitan dos personas que respeten el espacio, los valores y los límites de cada uno» para poder hacer 'Hot bedding'. «Es como compartir una habitación con dos camas; sin embargo, duermen juntos en la misma cama, por lo que definitivamente necesitas una cama grande y mucho espacio en la habitación para que valga la pena», explicó.

Monique explicó que decidió dar un giro a su vida cuando se quedó soltera al comienzo de la pandemia del Covid-19 y cuando el 'próspero' negocio de una agencia de educación internacional y alojamiento para estudiantes donde trabajaba colapsó como resultado del virus. También descubrió que su carrera docente se había vuelto repentinamente insatisfactoria cuando las clases comenzaron a ser de manera 'online' para garantizar el distanciamiento social. «Mi vida estaba literalmente implosionando más allá de mi control. Sabía que mi única opción era innovar y pensar fuera de lo común, y así fue como decidí practicar 'Hot bedding'».

Por último, la australiana ha revelado que, pese a estar disfrutando de la experiencia, va a aumentar los precios del 'Hot bedding' a 127 libras por semana, unos 150 euros, «ya que el coste de vida ha aumentado significativamente en Australia y mi habitación sigue siendo hermosa y cómoda, del tamaño de una suite de hotel de cinco estrellas».