Las monedas de 2 céntimos que pueden valer hasta 1.000 euros

Las monedas de 2 céntimos de euro son las que suelen quedar al fondo del monedero y las que se suelen usar para pagar justo algún producto o introducir en máquinas expendedoras o de un parking, una moneda que muchos consideran de poco valor en el día a día, pero que puede estar cotizada, según publica el portal tododisca.com.

El 1 de enero de 2002 comenzó a circular de manera oficial el euro, y de este año es un moneda de 2 céntimos acuñada en Italia. Sigue siendo legal, pero debido a los pocos ejemplares que siguen circulando ha aumentado su valor considerablemente y pueden llegar a valor 150 euros. Una moneda alemana de 2004 puede alcanzar los 350 euros y su valor se debe a las pocas que ya hay en circulación.

También de 2002 es una moneda acuñada en Austria. Según el portal en las últimas subastas ha alcanzado el valor de 1.000 euros y fue una de las primeras en entrar en circulación.

El portal pone como ejemplo en su artículo una moneda acuñada en España hace solo 5 años, en 2018. En la actualidad, según indican, es una de las más cotizas, aunque no se exponen los motivos.

Las monedas de 2 céntimos no son las únicas actuales que pueden reportar unos beneficios extra superiores a su valor real. El portal 'Business Insider' indica en un artículo publicado en el mes de noviembre que monedas de 10 céntimos pueden llegar a valer hasta 900 euros.

Como en el caso de las monedas de 2 céntimos, la mayoría de estos ejemplares han aumentado su valor bien porque apenas están en circulación o bien porque sufrieron defectos de fabricación (como los bordes mal impresos e irregulares de una moneda de 10 céntimos alemana de 2002). Ocurre también en algunos casos de monedas de 5 céntimos que pueden valer hasta 850 euros por su escasez o por errores en la acuñación.

A pesar de que el uso de las tarjetas ha crecido de forma notable gracias a móviles y otros aparatos inteligentes, el dinero en efectivo sigue siendo lo más utilizado especialmente para pequeñas compras y pequeños comercios. Es posible que alguna de estas monedas que aumentan su valor en el mercado de los coleccionistas sigan por alguna casa con sus dueños ajenos a lo que valen.