Esta es la forma más fiable de saber si las fresas provienen de España o de Marruecos

Aunque las fresas afectadas con el virus era un único cargamento de 1.500 kilos de fresas, el miedo a consumirlas o que se vuelva a producir una situación similar hizo que los ciudadanos quisieran comprobar la procedencia de las fresas, que llevan siendo protagonistas en las fruterías y supermercados durante las últimas semanas.

Con el objetivo de ofrecer al consumidor la información necesaria para saber las características concretas sobre el alimento que va a ingerir, uno de los elementos que incluye la normativa alimentaria es la obligatoriedad de indicar el origen de alimentos frescos como frutas, huevos, pescados, hortalizas o carne.

Así, las fresas entrarían dentro de este grupo, teniendo que incluir en su etiquetado el país de origen o procedencia y, en el caso de ser a granel, tener un cartel donde se señale lo propio. Aún así, a veces no se expone de manera clara dicha información, por lo que te explicamos una forma fácil y rápida que no suele fallar para saber la procedencia de lo que comemos, en este caso de las fresas, pero puede ser de cualquier producto fresco.

El modo de hacerlo consiste en fijarnos en el código de barras o Código Numeración Europea de Artículos (EAN), normalmente formado por 13 dígitos, aunque también puede tener 8 o 12, según el tipo de producto y de la región. La clave está en los dos primeros números, ya que son los que indican el país o región donde se emitió, es decir, su procedencia geográfica, según la Lista de prefijos de GS1.

De este modo, para saber si un alimento es de fabricante o proveedor español, el código de barras debe empezar por el número 84. Mientras que el código de barras que comience por 661 es el que corresponde a Marruecos. Esto se puede aplicar tanto a las fresas com a otras frutas, verduras, hortalizas, carnes o pescados.

Esta codificación corresponde al objetivo de la OCU (Organización de consumidores y Usuarios) de dar transparecia a los clientes, preocupándose por la calidad y procedencia de los alimentos que existen. Teniendo esta información, el consumidor puede decir si elegir un producto u otro con el fin de llevar a cabo prácticas de consumo responsable.