Un farmacéutico explica si es malo beber agua durante las comidas y cómo afecta a la digestión

Sin embargo, la Organización Mundial de la Salusd (OMS) desmontó este mito hace poco, indicando que realmente no existe una cantidad concreta y exacta de litros que un ser humano debe tomar, sino que la ingesta de agua dependerá de cada persona, de su edad, sexo, peso y condición física, entre otros factores.

Con esto, la OMS recomendó que, de forma genérica, un adulto sano debe consumir entre dos y tres litros de agua al día, incidiendo en la importancia de tomarla antes, durante y después del ejercicio físico, siempre tomando un agua que sea potable y de suministro seguro.

Una buena hidratación, junto con una alimentación equilibrada y la realización de ejercicio físico, huyendo de una vida sedentaria, son claves para mantener una buena salud. Si relacionamos beber agua y comer, puede que existan algunas dudas en cuanto a cómo tomarlas juntas. La afirmación de que es malo beber agua mientras se está comiendo está muy extendida pero, ¿qué hay de cierto en ello?

Ante esta cuestión, el popular farmacéutico Álvaro Fernández, conocido en redes sociales como @farmacéuticonfernandez, ha querido desmentir algunos mitos que se recogen en otro vídeo de Instagram, al que ha contestado y reaccionado el profesional sanitario.

En el vídeo que va a desmentir, empiezan afirmando lo siguiente: «La digestión empieza en la boca donde la saliva contiene enzimas que descomponen los alimentos, si bebemos agua mientras comemos diluimos las enzimas, lo que dificulta la descomposición adecuada de los alimentos, a lo que el farmacéutico indica que no es del todo verdad:

«La comida se mezcla con las enzimas de la saliva durante la masticación, por eso es tan importante lo de masticar 20 veces y claro, mientras masticas no bebes, así que puedes mezclar y mezclar. Y, además, aunque bebieras tampoco sería verdad porque se podría diluir la saliva pero aún así las enzimas son específicas, ignoran el agua y solo se mezclan con la comida», explica.

Además, añade que se ha demostrado que tomar pequeñas cantidades de agua durante la comida favorece la digestión, la basorción de nutrientes y ablanda las heces, «¿y qué tiene que ver lo de las heces? Bueno, ayuda a prevenir el estreñimiento» aclara Fernández.

Aún así, también ve necesario indicar que un consumo excesivo de agua comiendo puede ser malo: «Sí que es verdad que beber una cantidad excesiva de líquido durante las comidas puede empeorar algunas enfermedades gástricas como el reflujo o la gastritis. Así que un poquito de agua durante las comidas está fenomenal, hincharte a líquido obviamente puede aumentar la distensión abdominal y hacer que te sientas mal. Pero si siempre tiene hinchazón o inflamación lo que tienes que hacer es ir a un médico de verdad», concluye.