Una española en Estados Unidos va al supermercado más caro a hacer la compra: «Y a esto le sumamos...»

Lo cierto, es que en Estados Unidos llama la atención los precios de algunos alimentos y su tamaño, algo a lo que no estamos acostumbrados en España. Y si es un supermercado normal se puede entender, pero también existen en el país capitalista por antonomasia los establecimientos con artículos que superan con creces los normales.

«El producto es de muy buena calidad, pero va más allá. Comprar en Erewhon es toda una experiencia visual con un nivel increíble de detalle», señala la joven, que rápidamente surca por los estantes del lugar como un niño que acaba de descubrir una piedra preciosa en el parque y acude a enseñársela a sus padres: «Leche, 20'99 dólares. Una docena de huevos, 14'99. Unos arándanos, 25. Hielo, aunque no vaya a comprar, 29'99. Agua, que tampoco voy a comprar, 21'99, y eso que está de oferta».

La leche, se deduce, es con la que se bañaba Cleopatra. Los huevos deben de ser como mínimo de velocirráptor, o de mamut, o de la oca de los huevos de oro, y los arándanos han tenido que salir de la famosa mata de habichuelas, deben conducir al cielo o algo parecido. Qué menos. Y el hielo o el agua, en fin, llevados a Los Ángeles por los mismísimos Manny y Sid.

La lista continúa: «Este yogur, a 8'69 dólares. Carne picada, a 18'99. Pollo, 19'36. Granola, 15'99. Salsa boloñesa, 25'50. Pimiento troceado, 8. Espaguetis, 8'99». El total de la compra de Gabriela acaba sumando 166'50 dólares, a lo que hay que añadir, indica, 20 más por un batido de Hailey Bieber's. Sí, 20 pavos por un batido. 20. Veinte.