Una enfermera explica cuánto dinero y esfuerzo cuesta la fecundación in vitro cuando estás llegando a los 40 años: «La Seguridad Social te pasa hasta...»

Maribel Rivera, una enfermera de 50 años que trabaja en la UCI del Hospital Universiatario Puerta del Mar de Cádiz, tuvo el deseo de ser madre. Pero no pudo conseguirlo. Tras un largo proceso de aceptación y un enorme trabajo psicológico, esta mujer se ha atrevido a contar su dolorosa experiencia tras afrontar el duelo perinatal de sus tres hijos no nacidos.

Maribel Rivera dice en el podcast 'UN PROPÓSITO' que su interés por la maternidad le vino «bastante tarde». «Tenía que seguir los cánones establecidos. Tener una pareja estable, trabajo fijo... Todo eso lo conseguí entre los 30 y 40 años», relata. Sin embargo, ella misma reconoce que «los mejores óvulos de la mujer están en la década de los 20», por lo que sabía que tenía un duro camino por delante. Y, a veces, hay tantas piedras en el trayecto que no se puede llegar hasta el final.

La enfermera ha recordado cómo fueron las pérdidas de sus bebés: «No había latido, pero tenía que parirlo. Te conviertes en una madre que está viviendo lo peor. No hay nada que te puedan decir. Me dieron pastillas para expulsarlo, pero fue un aborto incompleto y me tuvieron que hacer un legrado. Los tres embarazos fueron legrados».

«No soy madre de hijos vivos, pero me siento madre. Nos ha tocado maternar de una forma difícil, que es con lo brazos vacíos. Caí en una depresión y no le encontraba sentido a la vida», se sincera.

Rivera dice que lo más positivo que saca de su experiencia es haberla podido transformar en ayuda. Ahora ejerce una labor altruista en la asociación Matrioskas, que se dedica al acompañamiento en el duelo gestacional y perinatal. «Quería que otras familias encontraran en mi historia un espejo en el que poder reflejarse y las herramientas para poder salir de eso», añade.

Maribel Rivera señala que uno de sus objetivos era volver a tener la oportunidad de dar vida. Por ello, decidió ponerse en tratamiento. La enfermera detalla cómo fue el proceso: «Ha durado casi dos años y he tenido dos fecundaciones in vitro que no llegaron a fecundar».

Y es que estos métodos no garantizan nada. La clínica de reproducción asistida URH García del Real señala que la probabilidad de embarazo de las mujeres de entre 41-42 años que se someten a esta técnica baja al 22% y hay un riesgo de aborto superior al 35%.

«Recibir una beta negativa es duro. Muy duro. Tienes todas o la mayor parte de las variables controladas y te preguntas qué ha pasado. No ha podido ser ni en una ni en otra ocasión», lamenta Rivera.

Además del impacto psicológico que conlleva someterse a un proceso de fecundación in vitro, Maribel Rivera subraya el enorme gasto económico que supone. «La Seguridad Social te pasa hasta cierta edad y hasta cierto número de intentos. Yo ya estaba muy pasada de eso, entonces lo he tenido que hacer enteramente privado», declara.

En la entrevista, la enfermera ha revelado cuándo dinero puede llegar a costar la fecundación in vitro. «Entre 10.000 euros y 14.000 euros», confirma.