Patrick Synge, cofundador y director ejecutivo de Metrickal, una empresa que opera de manera totalmente remota con diez empleados a tiempo completo y más de 200 contratistas en todo el mundo, relató la situación que lo llevó a despedir al trabajador. «En enero, descubrí que uno de nuestros empleados estaba trabajando en secreto en un segundo trabajo remoto a tiempo completo», explicó Synge.
El empleado en cuestión, radicado en Perú, había sido contratado en 2022 e inicialmente había mostrado un gran rendimiento. Sin embargo, poco después, comenzaron a surgir quejas de los clientes debido a tareas y plazos incumplidos y una notoria falta de comunicación por parte del empleado. «Cuando empezó a rechazar ciertos turnos en los que solía trabajar, comencé a sospechar. Sin pruebas concretas, no quise sacar conclusiones precipitadas, pero tuve reuniones individuales con él para discutir su desempeño laboral», manifestó el director ejecutivo de Metrickal.
Un software de rastreo
Mientras esta situación se prolongaba, Synge implementó un software de seguimiento del tiempo llamado 'DeskTime', con el objetivo de entender mejor cómo empleaban su tiempo sus empleados y optimizar la productividad. Sin embargo, este software no solo rastreaba el tiempo, sino que también incluía una función de captura de pantalla.
«Revisé los datos de seguimiento y noté que el nombre de otra empresa, una estadounidense, aparecía regularmente en los registros del empleado problemático. Me quedó claro que estaba trabajando para otra empresa durante su jornada laboral con nosotros. Lo despedí al día siguiente», relató Synge. Los datos del software mostraron que el empleado estaba utilizando aplicaciones no relacionadas con su trabajo en Metrickal y, a través de las capturas de pantalla, quedó evidenciado que estaba realizando tareas para la otra compañía.
«Basándome en los datos de 'DeskTime', calculo que había dedicado casi la mitad de su tiempo laboral a esta otra empresa. Probablemente olvidó que el software de seguimiento estaba activo en todo momento», confesó el cofundador de Metrickal. La evidencia fue concluyente, y aunque los indicios de incumplimiento de plazos y falta de respuesta ya habían generado sospechas, los datos recopilados proporcionaron la prueba física necesaria.
No obstante, tras el despido, el empleado actualizó su perfil de LinkedIn indicando que trabajaba a tiempo completo para la otra empresa, confirmando así las sospechas de Synge.
El sobreempleo
Por último, el director y confundador de Metrickal reveló su oposición al sobreempleo. «Sé que algunas personas pueden juzgarme, pero no apoyo la tendencia del uso excesivo. Creo que esto no es ético y simplemente está mal. En primer lugar, no creo que sea justo para el resto del equipo tener que encubrir el mal desempeño de otra persona. Es por eso que mantener a este empleado en la empresa no era una opción. No fue justo ni respetuoso con el equipo y eso es algo que no puedo tolerar.
En segundo lugar, no creo que una persona pueda realizar dos tareas al mismo tiempo de manera productiva, incluso si usa inteligencia artificial u otras herramientas. Su atención se dispersará y la calidad de su trabajo se verá afectada. Como emprendedor, primero tengo que pensar en mi negocio y en mis clientes. No puedo darme el lujo de perder clientes porque alguien quiere ganar más dinero», sentenció Synge.
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