Un carnicero lanza un aviso a quienes compran solomillo de pollo en los supermercados: «Se ha puesto de moda»

En este sentido, por este mismo motivo muchos han perdido la práctica en ir a pedir la carne al corte en carnicerías de toda la vida y a menudo se guían por las explicaciones e indicaciones de los embalajes. Si bien muchos aplauden la comodidad, esto también genera una cierta reticencia por parte de quienes defienden el pequeño comercio de toda la vida y por quienes temen que estos platos preparados tengan conservantes poco saludables.

Sea como sea las opciones en las neveras de los grandes supermercados son muchas y sobre una de ellas ha querido alertar ahora el popular @el_as_carnicero. Mariano Sánchez, como se llama en realidad este carnicero 'tiktoker', ha querido subir un vídeo para alertar a sus seguidores sobre el «solomillo de pollo, que se ha puesto de moda» en muchos supermercados.

El 'tiktoker' avisa, ya desde un principio, que «lo cobran en los supermercados mucho más caro siendo pechuga de pollo normal y corriente». Así, él destaca que lo único que pasa es que «ahora el solomillo de pollo está de moda» y avisa, acudiendo precisamente a un establecimiento que lo vende, sobre la diferencia de precio que acaban pagando quienes escogen este producto.

«Vais a ver e precio que tiene de diferencia de comprar solomillo de pollo a pechuga de pollo», se anticipa él, que muy indignado se pregunta si «¿estamos locos o qué?». «Pues sí, estamos bastante locos», responde Alberto, que muestra dos bandejas en las que se ve que el solomillo se cobra a 8,69 euros el kilo mientras que la pechuga entera sale a 6,39 euros el kilo.

Así, el resalta estos 2,30 euros de diferencia entre ambos productos y reitera que «estamos locos de pagar el solomillo de pollo más caro que la pechuga». Alberto lo argumenta porque, como confirma, «el solomillo de pollo es una parte de la pechuga de toda la vida de Dios, que cualquier carnicería de barrio te lo van a poner al mismo precio, al precio de pechuga».

Para sentenciar, el carnicero ejemplifica con un caso real de una bandeja que cuesta 4,01 euros, que si pagáramos el solomillo a precio de pechuga, «que es como debería de ser», tendríamos que pagar en realidad 2,94 euros. Por todo ello, el experto acaba lanzando un claro mensaje: «Vosotros mismos, si queréis consumir solomillo de pollo pues seguid pagándolo más caro».

La cuestión ha dado para algunos mensajes como el de una usuaria que lamenta que «hacen lo que quieren, saben que lo van a vender igual. Aprovechan la palabra 'solomillo' que suena mejor». Otro internauta ha apuntado que «el problema es que ahora venderán la pechuga sin solomillo» porque lo venderán aparte para quien lo pida.