Agreden y roban a un famoso youtuber en Barcelona: «No eran noruegos ni tampoco suecos»

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José Luis Fernández

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Rene ZZ es un 'youtuber' gallego especializado en tatuajes que reside actualmente en Madrid. El fin de semana del 11 y 12 de marzo viajó a la capital catalana por unas gestiones. «Vengo cada dos por tres, Barcelona es una ciudad que me encanta, en la que viví durante cuatro años en el pasado«, apunta en el vídeo, donde deja claro que a pesar de la mala fama reciente de la Ciudad Condal, ha salido «miles de noches» y nunca le había pasado nada. Hasta ahora.

«Salí con un grupo de amigos a la discoteca Razzmataz después de un concierto. Todo iba bien hasta que los perdí y me acabé juntando con otro grupo. La noche estaba ya terminada y decidí tomar una VTC para ir a casa. Tampoco estuve mucho rato fuera, ni anduve por lugares especialmente hostiles«, cuenta Rene ZZ, que de repente se dio cuenta de que no había nadie por la calle. Nadie, excepto tres »tipos« con gorra parados a unos 20 metros de donde se encontraba.

«No daré detalles de la raza de los chicos, pero no eran Noruegos ni tampoco suecos. Más bien, del color que a mí me gusta para los tatuajes«, ironiza el 'influencer', que estaba hablando por WhatsApp con una amiga, a la que le envió una foto de los chicos y le comentó bromeando: »Mira, estos me van a atracar«.

Dicho y hecho. Uno de los chicos (el más grande) se acercó al youtuber y le ordenó que le diera el móvil. «Por supuesto le contesté que no», explica Renne ZZ, a quien se le acercaron los otros dos. «Entonces empezó el forcejeo y me tiraron al suelo. No recuerdo que me hicieran mucho daño, podría haber sido mucho peor. Intentaban quitarme el móvil (un iphone 14 pro max) pero yo lo agarraba con fuerza y no lo conseguian«, recuerda de manera muy vivida.

«¡Dejadlo en paz!», gritó una voz femenina a lo lejos, cuenta Rene ZZ, que en aquel momento recuerda que pararon las patadas, pero que lograron extraerle el móvil de la mano y salir corriendo. Después de eso, explica, llegó la VTC que había pedido y lo llevó a casa, donde llegó a la conclusión de que podía haber sido mucho peor, y eso le sirvió para tranquilizarse.

«Estoy bien, no os preocupéis por mi», aclara el youtuber a su audiencia, todo mientras muestra la denuncia que ha interpuesto (ocultando, por supuesto, los principales datos). «Solo espero que este vídeo no se malinterprete, me gusta compartir lo que me ocurre, tanto lo bueno como lo malo y solo espero que esto sirva a muchos de lección«, aclara.