Intentan vender por Wallapop una piel de oso pardo a 5.000 euros

Según ha informado este lunes el Departamento de Agricultura de la Generalitat, la piel del oso, que ha sido decomisada, procedía de Rusia y entró ilegalmente en España.

El decomiso es el resultado de una investigación iniciada por el Grupo de Apoyo de Fauna y Flora y del Área Básica en febrero de 2015, a raíz de que los agentes vieran un anuncio en dicha plataforma en el que se ofrecía una piel de oso pardo por un precio de «5.000 euros negociables».

Atendiendo a que el oso pardo (Ursus arctos) es una especie con la máxima protección (categoría A) por la Ley catalana de protección de los animales, su comercio está regulado por un Reglamento de la Unión Europea.

Los Agentes Rurales se pusieron en contacto con el vendedor y comprobaron que la piel puesta a la venta por Internet llevaba un precinto legal y sellos del Órgano Estatal de Veterinaria de la Federación Rusa.

Por su parte, el vecino de Cubells mostró a los agentes documentación en ruso sobre el origen de la piel. Después de la traducción realizada por los servicios lingüísticos del Departamento de Agricultura, se comprobó que el animal había sido abatido de forma legal en la provincia rusa de Kamchatka y que tenía licencia para la exportación.

Uno de los documentos acreditaba incluso que los niveles de radiactividad de la piel están por debajo del umbral máximo establecido.

Sin embargo, el vendedor no pudo acreditar la importación legal de la piel a España ni poseía el documento ante la autoridad CITES (Convenio Internacional de Tráfico de Especies Protegidas) que debe acompañarla para el comercio.

Por ello, los Agentes Rurales denunciaron al vecino de Cubells, por haber introducido la piel de oso en territorio estatal sin haberla declarado y por intentar venderla sin la autorización obligatoria.

Inicialmente, los Agentes Rurales inmovilizaron la piel en el domicilio del propietario pero tras una resolución de la Agencia Tributaria se decretó el decomiso definitivo de la piel y ésta se ha trasladado a las dependencias de La Farga de Moles.

A raíz de la denuncia que pusieron los Agentes Rurales, la Agencia Tributaria ha sancionado al poseedor de la piel por una infracción de la Ley de contrabando.