Diez de las esculturas más curiosas e impresionantes del mundo
La fuerza de estas colosales creaciones no deja indiferente a nadie
Vayas donde vayas, en cualquiera de los cinco continentes, podrás contemplar maravillosas esculturas repartidas por las ciudades. El hombre ha esculpido en distintos materiales desde el principio de los tiempos, haciendo de este arte una manera más de expresar sus sentimientos. La tecnología y la combinación de diferentes técnicas permiten que las posibilidades en la actualidad sean casi infinitas, ofreciendo resultados verdaderamente impactantes.
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En el blog Bored Panda encontramos una espectacular recopilación de piezas, algunas de ellas poco conocidas lejos del lugar donde están. La que puedes ver sobre estas líneas, fotografiada en Nueva York, se llama «Expansion» y su autor es Paige Braidley , que nos cuenta cómo la creó en su blog personal . En realidad, se trata de una escultura que ya había terminado y que decidió destrozar para reconstruirla de nuevo de una manera completamente nueva.
El ucraniano Alexander Milov es la mente que está detrás de esta bella creación, a la que puso por título «Love» . «Muestra un conflicto entre un hombre y una mujer, así como la expresión interna y externa de la naturaleza humana. Su ser interior tiene forma de niños transparentes que se cogen de las manos a través del enrejado. Cuando oscurece los niños brillan, simbolizando la pureza y la sinceridad que une a las personas», explica Milov. La imagen se tomó en Nevada.
En una línea similar está esta escultura de Zenos Frudakis , llamada «Freedom» . «Quería crear algo que casi cualquiera, sin importar su procedencia, pudiese mirar y reconocer enseguida la idea de luchar para liberarse. Habla de la lucha por alcanzar la libertad a través del proceso creativo», cuenta el autor. Fabricada en bronce, puedes verla en Philadelphia.
En la pequeña localidad de Oneşti, en el distrito de Bacău en Rumanía, las puestas de sol pueden ser así de bellas gracias a esta obra. Es un monumento dedicado a Mihai Eminescu , probablemente el poeta rumano con mayor reconocimiento internacional. Su sencillez y su perfecta combinación con el entorno enamoran a cientos de turistas y visitantes.
Han Meilin , el mismo artista que diseñó las mascotas de los Juegos Olímpicos de Pekín en 2008, fue el encargado de concebir esta descomunal estatua de Guan Yu , célebre general chino que es considerado un dios de la guerra. Fue inaugurada recientemente, mide nada menos que 58 metros de alto y pesa 1320 toneladas. En su interior hay un museo con 8.000 metros cuadrados de superficie.
Este monumento, llamado «Ocean Atlas» , reposa en aguas de las Bahamas. Nos muestra una niña cargando sobre sus hombros el peso del océano; y en el momento de su colocación se convirtió en la escultura submarina más grande del mundo. Su autor es un auténtico especialista en esta clase de piezas, Jason deCaires Taylor , como podrás comprobar en su página web .
Al suroeste de Polonia, en Breslavia, encontramos este «Monumento al transeúnte anónimo» . Son figuras de bronce creadas a partir de otras similares diseñadas en 1977 por Jerzy Kalina. Este conjunto fue inaugurado en diciembre de 2006 y pretende simbolizar los sentimientos de los polacos durante la etapa comunista, en una localidad donde se registró una destacable actividad de oposición al régimen.
Esta es una creación mucho más antigua que la mayor parte de las que figuran en este listado, pero no por ello menos impresionante. Es el «Appennine Colossus» de Giambologna , originalmente erigida a finales de 2016 en el jardín de la renacentista Villa de Pratolino, en Vaglia, Toscana. Tras la demolición casi total de ésta en 1820, los restos fueron integrados en la Villa Demidoff, a 12 kilómetros al norte de Florencia.
Esta escultura es parte de una serie creada por el italiano Lorenzo Quinn , llamada «La fuerza de la Naturaleza» . Trata de recordarnos que los seres humanos vivimos con una especie de «falsa seguridad», sin temer el terrible poder de una naturaleza que puede desatar su furia en cualquier momento. Existen distintos ejemplares de esta figura en bronce repartidos por varios puntos del planeta.
El artista Robin Wight utilizó cables de acero inoxidable para erigir estas hermosas esculturas de hadas bailando con dientes de león . Además, dotó a estos seres fantásticos de corazones de piedra, algunos de ellos con un mensaje grabado. Si quieres verlos en directo, puedes visitar los jardines de Trentham, en las proximidades de Stoke-on-Trent (Reino Unido).
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