Para 4
1.4€/pers.
295kcal/100g
Ingredientes
- 800 g. de costillas de cerdo troceadas
- 10 dientes de ajo
- 1 limón (el zumo y su ralladura)
- 1 hoja de laurel
- Perejil fresco
- Sal fina (unos 5 g. aproximadamente)
- Pimienta negra recién molida (al gusto de cada casa)
- 50 ml. de vino blanco (o usar otro tipo de vino que te guste, lo mejor que sea afrutado y dulce)
- Unos granos de pimientas (para la maceración)
- Aceite de oliva virgen extra (50 ml. para la maceración y 50 ml. para la cocción)
Las recetas con costilla de cerdo siempre triunfan en casa. Es un tipo de corte de carne del cerdo que solemos utilizar con frecuencia en nuestra cocina y que es muy sabrosa.
Encontraréis un montón de propuestas, desde las clásicas costillas guisadas, al estilo americano, costillas con salsa barbacoa o las socorridas costillas al horno. Una pieza del cerdo muy útil para tener en casa o para otros usos como un churrasco como solemos preparar en las barbacoas en Galicia, también llamadas churrascadas.
Estas costillas de cerdo, se convierten en una receta con una carne muy sabrosa y económica. Un plato que mi madre nos preparaba muy a menudo, nos encanta la combinación de la carne con el ajo, al igual que el pollo al ajillo. Recetas que combinan nuestra filosofía, la sencillez y la tradición. Espero que os animéis a prepararlas en casa.
Receta casera de costillas al ajillo

Preparación de las costillas
- Lo primero que hacemos al comprar las costillas es decirle al carnicero que nos las trocee con el corte deseado, ya veis en las fotos como nos gustan en casa. Mi consejo es que sean porciones de 5 cm más o menos. Aunque también se pueden hacer enteras, pero son más complicadas a la hora de comer.
- Si las troceáis vosotros, cuidados con astillas los huesos, que luego pueden ser un fastidio si os metéis alguno en la boca. Pelamos los dientes de ajo y los laminamos.
- Salpimentamos los trozos ligeramente. Adobamos luego con pimienta negra en grano, una pizca de perejil fresco, la hoja de laurel, 5o ml. de aceite de oliva virgen extra, la ralladura de un limón, el zumo de medio limón y el ajo laminado. Las dejamos así unas doce horas o de un día para otro.
- En una cazuela ancha ponemos a calentar medio dedo de aceite de oliva. Cuando esté caliente vamos echando nuestras costillas con el macerado. Siempre de pocas en pocas, para que no se nos baje el calor del aceite y no nos salpiquen demasiado.
- Los cocinamos a fuego medio alto, estando pendientes de que no se nos quemen.
- La idea es que los ajos queden caramelizados y que sirvan de aromatizante de nuestro aceite. La costilla debe quedar bien frita, lo cual nos llevará unos 15 a 20 minutos por lo menos.
- Tenemos que estar pendientes de darle la vuelva a los trozos de vez en cuando para procurar que queden doradas por todas partes. Lo que queremos es que la costilla quede perfectamente cocinada por dentro y tostaditas por fuera.









Preparación de la salsa y guarnición
- Cuando vemos que nuestra carne está casi lista retiramos el exceso de aceite, agregamos el vino blanco. Seguimos cocinando la carne hasta que el vino se haya reducido casi por completo. Tiene que quedar muy reducido, tal como veis en el paso a paso de las fotos.
- La guarnición para acompañar este plato puede ser una simple ensalada mixta. También le van genial las patatas panaderas o unas patatas fritas.
- Las patatas al microondas que hemos preparado ya varias veces en el blog le van también como anillo al dedo. Una idea de acompañamiento casi sin grasa, una buena opción.
- Servimos calentitas en la mesa con un poco de perejil picado por encima.



Consejos para unas costillas al ajillo de rechupete
- Un truco para que el plato gane aún más es dejar reposar las costillas unos minutos antes de servirlas, así se asientan los sabores. Si quieres darles un toque más potente, puedes añadir una pizca de guindilla junto a los ajos. Para una versión más ligera, se puede usar menos aceite y cocinar en cazuela de hierro, que mantiene bien el calor y ayuda a dorar la carne.
- El vino blanco seco es lo más habitual, pero si prefieres un sabor más intenso, prueba con un fino de Jerez o incluso con un chorrito de vermut. También puedes sustituir la hoja de laurel por tomillo o romero fresco, que le dan un matiz distinto y muy aromático.
- Incluso añadir un poco de pimentón (en casa solemos usar pimentón de la Vera agridulce) para darle color y aroma. Lo que no suele cambiar nunca es la combinación de ajo y costilla, que es lo que convierte esta receta en un fijo de nuestras recetas de rechupete, de las de siempre.
Curiosidades sobre la receta
- En muchas casas de España, las costillas al ajillo son sinónimo de celebración improvisada. No tienen un origen claro en una región concreta, porque es de esas recetas que se han cocinado siempre allá donde hubiera buen cerdo y buen ajo. Eso sí, la tradición de freír los ajos enteros para dar sabor al aceite es muy típica de la cocina castellana y andaluza.
- En algunos pueblos manchegos se preparan las costillas al ajillo con un toque de pimentón de la Vera, lo que además de color les da un aroma ahumado muy especial. En cambio, en la zona de Cádiz hay quien añade un poco de vinagre al final de la cocción para realzar los sabores.
- Una curiosidad es que esta receta tiene “primos lejanos” en otras cocinas mediterráneas: en Italia, por ejemplo, hay platos de cerdo guisados con ajo y vino blanco que recuerdan mucho a nuestra versión española. Eso demuestra que, al final, la combinación de carne y ajo es un lenguaje común en muchas culturas gastronómicas.
Última revisión: 3 diciembre 2025
Hemos trabajado 2 horas y 35 minutos para que disfrutes esta receta. ¿Cómo se calcula?
45 min. cocinando, 30 min. para hacer y editar las fotos, 45 min. para redactar y 35 min. para organizar y publicar todo en la web y en redes sociales.
😊 Sin contar lo que dedicamos a investigar cómo hacer la mejor receta, comprar los ingredientes, comerla (y repetirla si no ha salido de rechupete), leer vuestros comentarios y responder a las dudas.
Categorías: Comidas en familia Recetas con cerdo Recetas con pocos ingredientes Recetas de carnes y aves Recetas de costillas Recetas de frituras y freidoras





hola buenas tardes me encantan son muy ricas gracias
Parece muy buena receta. La haré mañana. Hoy a macerarla.
Que rebuena, no me la pierdo. Saludos y muchas gracias
Buenos días,he hecho la receta para macerar hoy y comer mañana. Lo único que me he dado cuenta de que en los ingredientes aparece vino blanco que luego no aparece en la elaboración, entiendo que va con el resto de ingredientes para la maceración¿Verdad?
Hola Lorena! Pues no le quedaría nada mal el vino en la maceración (me lo apunto para la próxima vez)
El vino blanco va en el paso a paso de la preparación.
Preparación de la salsa y guarnición:
1. Cuando vemos que nuestra carne está casi lista retiramos el exceso de aceite, agregamos el vino blanco. Seguimos cocinando la carne hasta que el vino se haya reducido casi por completo. Tiene que quedar muy reducido, tal como veis en el paso a paso de las fotos.