Fácil 
30 min 
Por Belén Otero
Para 4
0.8€/pers.
135kcal/100g
Ingredientes
- 1 litro de leche entera
- La piel de 1 limón (solo la parte amarilla)
- 1 ramita de canela
- 160 g de arroz redondo
- 120 g de azúcar
- Canela molida para decorar
Nada huele más a hogar que una olla exprés soltando vapor y ese aroma dulce de canela y limón recorriendo la cocina. El arroz con leche en olla exprés es la versión exprés (nunca mejor dicho) de uno de los postres más clásicos de la gastronomía española.
Es cremoso, suave, reconfortante y, lo mejor, se prepara en menos tiempo del que tardas en fregar los cacharros después. Una receta de las de toda la vida, pero sin tenerte pegado al fuego durante media hora removiendo como si te fuera la vida en ello.
El arroz con leche tiene más historia que el mismísimo arroz. Sus orígenes se remontan a la cocina andalusí, cuando el arroz y el azúcar se mezclaban en postres que luego se fueron adaptando a los gustos locales. De España viajó a medio mundo: en América Latina lo preparan con leche condensada, en Asia se aromatiza con cardamomo, y en Asturias —su cuna más famosa dentro del país— se sirve espeso, con su capa de azúcar requemada por encima.
Esta versión con olla exprés es la heredera moderna del guiso de antaño: mismo sabor de siempre, pero sin la espera eterna. Así que saca del armario la olla exprés Fissler y a preparar este arroz con leche, casi tan bueno como el de tu abuela. Ya ves, la olla exprés te ayuda a preparar de manera rápida, eficaz y de rechupete este postre.
El arroz tiene la habilidad de transformarse en mil y una delicias dulces. Muy en la línea de este postre, puedes animarte con unas natillas caseras de vainilla, un flan de huevo tradicional o una crema pastelera fácil, tres clásicos de cuchara que comparten ese encanto cremoso y casero que nunca falla después de una buena comida.
Receta casera de arroz con leche en olla exprés
Ingredientes para preparar esta receta
Preparación paso a paso
- Infusionamos la leche. Vertemos el litro de leche en la olla exprés, añadimos la piel del limón (solo la parte amarilla, que la blanca amarga) y la ramita de canela. Calentamos a fuego medio hasta que empiece a hervir. El olor a postre de abuela empezará a llenar la cocina en cuestión de minutos.
- Añadimos el azúcar. Retiramos la canela y la piel del limón. Incorporamos los 120 gramos de azúcar y removemos hasta que se disuelva por completo.
- Incorporamos el arroz. Añadimos los 160 gramos de arroz redondo, removemos bien y cerramos la olla. Subimos a fuego fuerte hasta que alcance la presión 1 (la media, en la mayoría de ollas modernas).
- Cuando la válvula suba, bajamos el fuego y cocinamos durante 15 a 20 minutos, según la textura que queramos: con 15 queda más entero y con 20 algo más deshecho y cremoso.
- Liberamos presión. Apagamos el fuego, dejamos que la olla pierda presión de forma natural y la abrimos con cuidado.
- Removemos y servimos. Damos unas vueltas para homogeneizar la textura —verás que espesa al enfriar— y repartimos el arroz con leche en cuencos o copas individuales.
- Dejamos enfriar a temperatura ambiente y luego guardamos en la nevera. Antes de servir, espolvoreamos con canela molida.
El resultado es una crema suave, perfumada y con el equilibrio justo entre dulzor y acidez del limón. Ideal para servir fría o templada, según el gusto de cada casa.
Consejos para un arroz con leche de rechupete
- Usa arroz redondo (tipo bomba o similar), ya que libera más almidón y da esa textura cremosa tan característica.
- No te pases con el fuego ni con el tiempo: si lo dejas demasiado, puede pasarse o quedar pastoso.
- Si te gusta más espeso, deja la olla destapada unos minutos después de abrirla para que evapore parte del líquido.
- Corta la piel del limón sin parte blanca, que amarga y puede arruinar el sabor.
- Ajusta el azúcar al gusto; incluso puedes añadir una cucharada de miel al final para darle un toque distinto.
- Si no lo vas a comer al momento, cúbrelo con film “a piel” para evitar que se forme costra.
Curiosidades de rechupete
El arroz con leche es uno de los postres más antiguos del recetario español. En el siglo XVII ya se servía en los conventos, donde las monjas lo preparaban para aprovechar el arroz sobrante y la leche fresca del día.
En Asturias, León o Cantabria se convirtió en una seña de identidad, y todavía hoy cada familia tiene su propia versión, con más o menos canela, con corteza de limón o naranja o incluso con un chorrito de anís. Lo curioso es que, pese a ser un postre tan tradicional, resiste el paso del tiempo mejor que muchos modernos: nadie dice que no a un buen cuenco de arroz con leche.
Última revisión: 20 noviembre 2025
Hemos trabajado 4 horas y 20 minutos para que disfrutes esta receta. ¿Cómo se calcula?
30 min. cocinando, 30 min. para hacer y editar las fotos, 120 min. para grabar y editar el vídeo, 45 min. para redactar y 35 min. para organizar y publicar todo en la web y en redes sociales.
😊 Sin contar lo que dedicamos a investigar cómo hacer la mejor receta, comprar los ingredientes, comerla (y repetirla si no ha salido de rechupete), leer vuestros comentarios y responder a las dudas.
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Gracias por el recetario. Siempre había deseado el saber hacer el arroz con leche, pues me recuerda las comidas en casa de mí abuela.
Espero que me salga bien, con los pasos que me habéis mandado.