«No puede haber mejor ambiente en el Real Madrid»

La complicidad del técnico y de sus hombres ha conseguido una unión de intereses que no rompe ni la lógica preocupación de los suplentes que menos juegan.

El equipo juega bien y, sobre todo, corre tanto o más que sus rivales. Presiona para robar el balón. Son las virtudes que Ancelotti ha introducido en el Real Madrid y que ha logrado hacer de un gran equipo un excelso conjunto. Mejor técnicamente que la gran mayoría de sus rivales, el sacrificio físico de los jugadores hace al líder un adversario casi intratable.

Los jugadores cogieron sus nuevos coches Audi mientras vislumbran ese récord de 19 victorias que sería un hito del fútbol español. Y hablan de ello. Mañana pueden alcanzar el decimosexto triunfo consecutivo, frente al Cornellá. El sábado, contra el Celta, pueden igualar la plusmarca del Barcelona de Rijkaard. Y el miércoles siguiente, el día 9, ante el Ludogorets búlgaro, optan a sentenciar ese registro español.

Luego habrá que vencer en Almería, el viernes 12, preludio del Mundial de Clubes, que los blancos juegan en Marruecos los días 16 y 20 de diciembre. Es la gran meta del Real Madrid. El título mundial. Florentino Pérez se lo ha dicho a los futbolistas.