Los porteros que no pudieron con Íker Casillas

Diego López

Diego López ha sido el último en unirse a una larga lista. Y el único que disputó de tú a tú la batalla con el portero de Móstoles. En su primera época en el Real Madrid, el gallego no pudo con el gran estado de forma de Casillas y tuvo que marcharse, buscando el éxito lejos del Bernabéu.

En Villarreal triunfó como cancerbero cuatro temporadas. Se ganó su fichaje por el Sevilla, donde no acabó de cuajar y regresó a las filas blancas de la mano de José Mourinho. Casillas se había lesionado y el portugués necesitaba un portero, así que se fijó en él y le dio la titularidad.

Pese a la recuperación del mostoleño, Diego siguió ocupando la portería, al igual que lo haría en Liga con Carlo Ancelotti en el banquillo la pasada temporada. Hubo una gran batalla para defender la portería y se la acabaron alternando. Para Diego, la Liga; para Íker, la Copa y la Champions. Un intercambio del que se cansó el gallego y acabó tomando rumbo a Milán, donde jugará las próximas cuatro temporadas.

Adán

Quizás fue el suplente más polémico de Casillas, aunque no por su culpa. Cuando José Mourinho le dio la titularidad ante el Málaga en un partido de Liga, Antonio Adán se convirtió en protagonista de una lucha entre el técnico y el portero de Móstoles.

Adán militó en el Real Madrid durante tres temporadas y disputó 18 partidos, ocho de ellos con Mourinho en el banquillo. Parecía que el portugués confiaba en él como recambio de Casillas, pero cuando el capitán se lesionó en su mano, buscó rápidamente un sustituto en el mercado.

Trajo a Diego López y sentenció a Adán, que acabó, primero en la grada y, después, sin equipo. La temporada pasada jugó en el Betis.

César Sánchez

Llegó en el año 2000 al Santiago Bernabéu y se acabó haciendo con la portería ante un joven Casillas. Fue en la temporada 2001-02. El exportero del Valladolid jugó la final de Copa del Rey y, a partir de entonces, se hizo con un sitio fijo bajo palos.

Vicente del Bosque ocupaba el banquillo y terminó la temporada con él, pero la suerte jugó a favor de Íker Casillas en la final de la Champions League en Glasgow. César se lesionó y el de Móstoles tuvo que salir para salvar a su equipo y levantar la novena Copa de Europa. Después de aquello, fue imposible quitarle la titularidad y César acabó marchándose al Zaragoza tres años después.

Illgner

Fue el portero que le dio el relevo a Casillas en la portería del Real Madrid. El de Móstoles tenía por entonces 18 años cuando se puso bajo los palos en San Mamés. Bodo Illgner se encontraba lesionado y precipitó el debut del joven portero.

Casillas disputó 47 partidos esa temporada y sentó al alemán, que aguantó en el banquillo blanco otro año más. Cansado, optó por la retirada en el año 2001.

Dudek

Fue el suplente perfecto de Casillas. Siempre con una sonrisa, el portero polaco llegó del Liverpool para no dar problemas. Jerzy Dudek se sentó en el banquillo desde el primer día y se preocupó únicamente por la Copa del Rey. Aunque solo hasta que llegasen las eliminatorias importantes.

Disputó 12 partidos en cuatro años y se ganó el cariño del vestuario, hasta el punto de despedirlo en su último encuentro haciéndole un pasillo. Fue su único partido en Liga de esa temporada y el último como futbolista profesional.

Jesús Fernández

Un chico de cantera que se ganó un puesto en el primer equipo, pero no pudo tampoco con Casillas. Condenado al banquillo, el portero estuvo tres temporadas a la sombra del cancerbero de Móstoles, hasta que finalmente ha optado por marcharse al Levante, donde jugará la próxima campaña.

Fue uno de los héroes del ascenso del Castilla a Segunda División y se mereció el ascenso a la primera plantilla. Allí disputó dos partidos en tres años.

Codina

Jordi Codina estuvo a la sombra de Casillas durante tres temporadas. El portero catalán subió al primer equipo en 2007 y partió acabando tomando camino de Getafe. Jugó solo un partido, pero ganó una Liga y una Supercopa de España en el tiempo que estuvo vestido de blanco.

Bizarri

Llegó al Real Madrid para ser el suplente de Bodo Illgner y se coló un joven Íker Casillas por medio. El argentino disputó siete partidos con la camiseta blanca, uno de ellos, la que era, hasta esta temporada, la última victoria del Atlético en el Bernabéu. Después emergió la figura del de Móstoles para quitarle el puesto en la portería.

Con Illgner lesionado, Bizzarri ganó protagonismo, pero su escaso nivel dejó la portería a Casillas y él buscó oportunidades en Valladolid.