Casillas desea seguir en el Madrid, piensa que será titular

La continuidad del capitán como suplente suscitó que meditara su futuro. Anhelaba ser titular con España en el Mundial. El Real Madrid no quería que estuviera incómodo. Las dos competiciones le permitirían mantenerse en forma. Y el club le dejó la puerta libre para negociar su porvenir a final de temporada. Ahora, hace un mes, la entidad en la que milita desde los nueve años le ha dicho que se quede. Cuenta con él para la próxima temporada.

Llegará de nuevo tres semanas después. Clubes ingleses y franceses han intentado convencer a Casillas para conseguir su fichaje en julio. Su ficha anual asciende a siete millones de euros netos y hay que ofrecerle al menos tres años para igualar su convenio actual, que finaliza en 2017. El cancerbero siempre ha dicho que su idea era «acabar mi contrato en el Real Madrid y, si es posible, terminar mi carrera en el club de toda mi vida». De acuerdo con ese sentimiento, la entidad le ha manifestado que olvide aquella «luz verde» concedida en agosto y no negocie con nadie. «Que espere». El capitán debe saber interpretar los mensajes cifrados. El consejo interno de la casa blanca para que siga se apoya también en los informes técnicos.

Ancelotti explicó en septiembre, días antes del comienzo de la Champions en Turquía, que Diego López e Íker tenían el mismo nivel cualitativo. «Son dos titulares». Razonó la elección del gallego como primer guardameta en su mejor forma física para empezar la Liga. Casillas había disputado la Copa Confederaciones con España y se incorporó a los entrenamientos con el italiano tres semanas más tarde.

El capitán ha expuesto con claridad su postura. Ha dicho que espera que aquel argumento no vuelva a ser determinante el 23 de agosto de este año, cuando comience la próxima Liga, porque el campeón del mundo disputará el Mundial de Brasil y se repetirá la misma situación: tendrá tres semanas de retraso en la preparación respecto a su rival por la posición.

Habrá un portero titular absoluto. Íker se agarra ahora a su consideración de «titular, al mismo nivel que Diego», para dar un giro a su suplencia en la Liga. Va a luchar por recuperar el puesto. Y piensa que lo conseguirá.

El Real Madrid quiere que sus dos porteros se sientan a a gusto. Ambos aseguran que permanecerán en la plantilla. El club blanco no presiona a nadie. Pero Ancelotti ha advertido que en su segunda temporada volverá a la normalidad de un equipo: el titular en la Liga debe serlo también en la Copa de Europa. Al suplente le quedará la Copa y algunos partidos de las otras dos competiciones. La experiencia de los profesionales dicta que no se puede mantener mucho tiempo una dualidad como la vivida en la portería. Sucedió con Benzema e Higuaín. Este cambio de filosofía del italiano, este retorno al funcionamiento habitual de un plantel, trastorna todo el equilibrio vivido hasta ahora entre los guardametas.

La entidad ha dejado claro que dará vía libre a que alguien aproveche una buena oferta. Diego López rechazó el verano pasado una propuesta del Mónaco de cinco millones anuales. El Real Madrid le permitió negociar y decidir. Ahora aplicará la misma política.